Los despidos masivos amenazan a más de 28.000 trabajadores
Los bancos encabezan una lista de eres que incluye firmas de comercio, automóvil o energía La pandemia acelera la reconversión de los modelos de negocio de parte de las compañías
Tras más de doce meses de pandemia, los efectos del coronavirus sobre la economía empiezan a entrar a una nueva fase. Tras la avalancha de los ertes, que coparon los primeros compases de la emergencia sanitaria, ahora las empresas empiezan a recurrir a medidas más traumáticas y que ya están dejando un importante reguero de despidos. En los últimos meses, 15 grandes empresas en España han anunciado o han cerrado ya expedientes de regulación de empleo que entre todos superan los 28.000 despidos.
Una cifra en la que coinciden reestructuraciones pendientes que la pandemia pospuso y ahora está acelerando, con empresas con problemas de viabilidad fruto de convivir más de un año con el virus. Las estadísticas de despidos colectivos prometen arreciar en los próximos meses, cuando las medidas de contención habilitadas por el Gobierno se vayan retirando y la crisis del covid acabe de dejar a la vista el impacto sin precedentes que está teniendo sobre la economía mundial.
DIGITAL
Sectores como la banca, con Caixabank (8.291 despidos), BBVA (3.798) o Santander (3.572), liderando las estadísticas de despidos, retoman reestructuraciones hacia nuevos modelos de negocio más digitales. Otras grandes firmas del comercio, como El Corte Inglés (3.292), H&M (1.066) o Douglas (492), han acelerado su salto al comercio electrónico. Y grandes fabricantes de automoción, como Nissan (2.525), Ford (630) o Robert Bosch (636), transitan en medio de la tormenta perfecta entre la depresión del covid y la transformación al vehículo eléctrico. «Muchas de estas empresas han vuelto ahora a revaluar sus perspectivas a medio y largo plazo», apunta el director de coyuntura y análisis internacional de Funcas, Raymond Torres.
«Antes de la pandemia ya estábamos en un proceso de cambio y esta ha venido a acelerar todos aquellos procesos relacionados con la digitalización, la inteligencia artificial y los algoritmos», afirma el secretario de política sindical de UGT, Gonzalo Pino. Así lo avalan los datos, pues en el 2019 las estadísticas de afectados por ere iban al alza (con 30.871 afectados en toda España) y se colocaban a niveles de la Gran Recesión.
Parte de esos grandes eres se explican, según coinciden las fuentes consultadas, por la aceleración que ha provocado la covid en todos esos cambios. Otros, sin embargo, son víctimas de la caída de la demanda tras más de doce meses de restricciones. «Los ertes funcionan cuando la crisis es de corta duración y se espera que la actividad vuelva rápidamente a los niveles anteriores. No sirven para solucionar problemas estructurales», explica el investigador de Fedea Marcel Jansen.
Si bien sectores como el bancario han acabado en el ere sin pasar por el erte, gran parte de las reestructuraciones que han trascendido en los últimos meses sí vienen de ese blindaje habilitado especialmente por el Gobierno, que se ha comprometido a renovar durante todo el año. No obstante, en algún momento los acabará retirando y no todos los 665.000 trabajadores en erte que hay en España volverán a sus puestos.
¿Cómo contener esa sangría? Ahí las fuentes consultadas coinciden: más y más eficientes políticas activas de empleo. «Hecho en falta un plan de reactivación del empleo y como reubicar a las personas en paro. ¿Por qué no nos hemos anticipado?», se pregunta Jansen.