Un referente de salud para miles de mujeres y niños
El centro atiende cada año cerca de 3.400 partos, 80.000 urgencias y 60.000 consultas La revolución tecnológica y la humanización de espacios han marcado sus 50 años de vida
El centro de referencia en Aragón celebra este 2021 su 50 aniversario Una gran labor asistencial apoyada en un equipo súper especializado Atención cálida y humana desde la concepción hasta la adolescencia
Hay pocos aragoneses que no hayan visitado en alguna ocasión las habitaciones o consultas del Hospital Materno-Infantil de Zaragoza. Los hay incluso que han nacido allí y han vuelto años después para dar a luz a sus propios hijos. Y es que el centro hospitalario lleva ya medio siglo recibiendo vidas.
El Hospital Materno-Infantil celebra este año su 50 aniversario convertido en un centro de referencia para la salud de miles de mujeres y niños de Aragón y de otras comunidades limítrofes, no solo en cuanto a partos, sino en otros campos como el cáncer o las cirugías complejas.
La calidad de la atención y la excelencia de sus profesionales caracterizan a este centro de la sanidad pública aragonesa, muy valorado por los usuarios, que atiende cada año cerca de 3.400 partos, 60.000 urgencias y 80.000 consultas entre todas sus especialidades.
El hospital cuenta con las unidades de Pediatría, Obstetricia, Ginecología y Cirugía Pediátrica, y suma a su labor asistencial una destacada actividad docente e investigadora, con la formación de distintos profesionales sanitarios y la participación en grupos de investigación reconocidos.
El materno abrió sus puertas en 1971 como parte de la Residencia Sanitaria José Antonio, ya entonces conocida como la Casa Grande. Fue en 1984 cuando se le asignó el nombre de Miguel Servet y su gran transformación llegó en el año 2002, momento en el que fue transferido al Gobierno de Aragón.
EN CONTINUA EVOLUCIÓN.
La revolución tecnológica ha marcado las cinco décadas de trayectoria del Hospital Materno-Infantil, pero también las consultas y los espacios interiores han dado un giro radical. Desde la zona de admisión, pasando por las paredes de todas las plantas, el color, los dibujos y la temática infantil predominan.
Se han producido avances en todas las especialidades. Las intervenciones tanto en mujeres como en niños se realizan hoy con técnicas no invasivas que reducen la estancia hospitalaria y, apoyados en enfermería y anestesia, han aumentado las cirugías sin ingresos. Destaca también la apuesta del hospital por el parto poco intervenido, con una tasa de cesáreas del 13%, una de las más bajas de España.
Asimismo, se han ido creando nuevas secciones y unidades de referencia como la de reproducción asistida, con más de 800 consultas anuales, la de cuidados paliativos pediátricos o la de suelo pélvico,para dar respuesta a las nuevas necesidades de salud de la población.
En la atención a los niños, la gran labor del centro se apoya en el desarrollo de distintas subespecialidades como Nefrología, Cardiología, Neonatales, Oncología pediátrica, Endocrinología y Diabetes, que atienden las patologías más complejas.
Además, cada año se diagnostican y tratan 600 casos de cánceres ginecológicos, como el de cuello de útero o mama, con cirugías conservadoras y técnicas pioneras como la radioterapia intraoperatoria.
Toda esta gran labor asistencial se apoya en la especialización de sus profesionales tanto de medicina como de enfermería y en una atención cercana y humana que han hecho del Materno-Infantil un icono de excelencia de la sanidad aragonesa 50 años después de su nacimiento.