Marc Márquez pide agua para intentar una nueva proeza
El campeón español saldrá sexto, con ‘pole’ para Quartararo, pero fue el más rápido con lluvia
Es mayo, es Francia, es Le Mans, el norte de París, un lugar intempestivo, aquí hace mal tiempo, casi siempre, casi clima inglés y los pilotos de MotoGP lo saben. Así que hoy (11.00 horas, DAZN y Movistar), todo el mundo sabe que puede ocurrir cualquier cosa en las tres carreras, empezando por la de Moto3, que arranca, ¡ojito! al dato con el ‘tiburón de Mazarrón’, sí, Pedro Acosta (KTM), el mejor debutante de la historia y líder destacado del campeonato, en la séptima fila de la parrilla. Es decir, Acosta, que ya ha ganado un gran premio saliendo desde su garaje, puede armarla de nuevo. O eso es lo que va a tratar de hacer.
Y, luego, llega MotoGP, con el joven francés Fabio Quartararo (Yamaha), recién operado del síndrome compartimental en el brazo derecho, liderando la parrilla por tercera vez consecutiva y presentando, de nuevo, su candidatura al título que defiende el bueno de Joan Mir (Suzuki). Y, en la segunda fila, estará un fabuloso Marc Márquez (Honda), que, tras diez meses, ayer volvió a liderar un entrenamiento de MotoGP.
«¿Qué prefiero? Lluvia. Bueno, prefiero una buena carrera, prefiero seguir mejorando, prefiero seguir sintiéndome cada vez mejor sobre la moto, prefiero seguir entendiendo la moto que hemos escogido, que es la del futuro pero, también, con la que, aún siendo más crítica, más física, que se mueve más, la que voy más cómodo o que mejor se adapta a mi estilo. Todo eso es lo que prefiero, pero, sí, si me preguntas diré que, en lluvia o en condiciones mixtas, más bien pista mojada, húmeda, tengo, incluso, hasta posibilidades de llegar al podio o rozarlo”.
Marc Márquez Alentá (Honda), sexto en la parrilla de salida de hoy (14.00 horas, DAZN y Movistar) en el Gran Premio de Francia, en el precioso y popular Le Mans, es cada vez más Márquez, siempre el mismo Alentá sonriente y todos los de su alrededor dicen que ya está a punto de ser, aunque aún le salta mejorar físicamente, el Marc de hace un par de años, cuando arrasó en el Mundial del 2019.
LA PROGRESIÓN «Soy feliz porque noto la progresión, pero aún me falta mucha fuerza en todo lo que es brazo, hombro y espalda derecha. Aún dudo en esas curvas, aquí la 1, la 5 y la 8, aún sufro para controlar la moto cuando se mueve mucho y es por ello que, si me preguntas, prefiero correr en agua o pista mojada porque aunque el riesgo de cometer un error, de una caída, es mayor, también las posibilidades de acceder al podio son mayores, pues en seco creo que podría acabar 5º, 6º o 7º como mucho».
Márquez habló sobre su moto, su estado de forma y la manera de conducirla. «Sé que es una moto más crítica, más física que la que llevaba en Jerez y Portimao, pero la entiendo mucho más y eso no quiere decir que el resultado tenga que ser mejor, pero sí que es mi moto del futuro, no es la mejor moto porque es muy física y cuesta un poco más, pero para el futuro está claro que es mi puesta a punto», aseguró. Da la sensación que MM93 está cumpliendo, paso a paso, el camino trazado para ser, lo antes posible, el campeón de siempre. Ya lo dijo el viernes. «No pienso hacer más de lo que pueda, sé de dónde vengo, sé donde estoy y sé dónde quiero llegar».
«Con la pista mojada o húmeda tengo opciones de llegar al podio», dice el catalán