Uno de cada cuatro hogares no puede afrontar gastos extra
La tasa de pobreza en menores es la más baja en 8 años pero uno de cada cinco la sufre La población infantil ha bajado un 37% en 12 años, con menos de 10.000 nacimientos
Los datos de tasa de pobreza en Aragón son «favorables» si los comparamos con los de España, pero eso debe tomarse solo como un acicate, ya que España se sitúa en el puesto 28 de pobreza infantil de la Unión Europea, solo por delante de Bulgaria y Rumanía. Y teniendo en cuenta que España es la decimoquinta potencia mundial «no podemos permitir tener una tasa de pobreza del 20%». Este es uno de los apartados en los que hace hincapié el Informe Anual sobre Infancia y Adolescencia en Aragón, que presentaron ayer el lugarteniente del Justicia, Javier Hernández; y el asesor de menores y mayores de la entidad, Andrés Esteban, poco después de habérselo entregado al presidente de las Cortes de Aragón, Javier Sada.
El segundo apartado aborda las quejas recibidas, que han descendido con respecto al año pasado; y se tratan además las visitas específicas a los centros residenciales de menores para concluir ofreciendo unas sugerencias a las distintas administraciones para paliar la situación de los niños de la comunidad.
Aragón experimentó el pasado año un descenso significativo de la tasa de pobreza relativa en menores de 0 a 17 años con respecto al anterior porque si «era de uno cada cuatro, ahora es uno cada cinco». «Hemos mejorado pero no es suficiente», aseguró Hernández, pese que se ha pasado de una tasa de casi 26 a 21, con cifras similares a las de 2018; y con una diferencia de 10 puntos con respecto a España. Es, dijo Esteban, la tasa más baja de los últimos años en Aragón, pero aun así, uno de cada cuatro hogares no puede hacer frente a gastos imprevistos, por lo que aunque la situación en la comunidad «mejora, sigue siendo alta».
Además, existe desequilibrio territorial de esa pobreza, puesto que varía según dónde viva ese menor. Por ejemplo, en Zaragoza, la tasa es del 25% pero asciende al 42% en Épila o baja al 13% en María de Huerva.
En cuanto a la población, el asesor de menores, quiso mostrar su preocupación por los datos demográficos, ya que en 2021 había casi 2.000 aragoneses de menos de 18 años menos que el año anterior, lo que supone casi un 17% respecto del total de la comunidad. Además, otra cifra inquietante es que por segundo año consecutivo los niños de menos de un año bajan de los 10.000, lo que explica el «sobreenvejecimiento» ya que «no es solo que vivamos más, sino que nacen muchos menos niños». En este sentido, precisó que el año pasado había un total de 13.915 niños de 12 años y unos 8.000 tenían menos de un año, lo que supone que la población infantil ha bajado un 37% en esos años, una tendencia suavizada por «la llegada de menores inmigrantes». Estos datos repercuten también en los «servicios públicos» existentes porque la distribución de menores es «muy desigual» en todo Aragón, ya que la población infantil de tres comarcas representa casi el 70% del total, frente al resto, que se distribuye en las 30 comarcas restantes.
QUEJAS El informe recoge un ligero descenso de las quejas del área de menores, habiendo 64 expedientes incoados (72 el año anterior), 72 archivados (frente a 103) y 9 en trámite (6 en 2020), pero se mantiene el contenido: las relaciones familiares por «quejas por separaciones conflictivas» y manipulación de los hijos, así como peticiones de «abuelos porque no les dejaban ver a sus nietos». En Sanidad las protestas han girado en torno a la asistencia pediátrica y sobre todo por «el déficit de atención en salud mental», ya que «faltan psiquiatras en muchas zonas rurales». Y en Educación, los expedientes tienen que ver con la falta de profesionales para una correcta atención del alumnado, sobre todo en las zonas rurales. La pandemia, dijo Esteban, ha puesto de manifiesto el «déficit» ya que hacen falta «recursos, profesionales y financiación».
Uno de los apartados del estudio tiene que ver con centros de acogida, donde se ha notado un «descenso de menores de otros países» pero han crecido los españoles, aunque se felicitó por el cambio de reglamento de los jóvenes extranjeros en estos centros que «pueden estudiar y trabajar». Sin embargo, criticó que los discapacitados intelectuales cuando cumplen 18 años ya no pueden estar en el centro mientras que el resto «sí porque existen prórrogas». Además, como «la escucha es importante», reclamaron lo que una niña les pidió, que «no haya discriminación por estar en un centro de menores porque yo no he cometido ningún error, estoy aquí por los errores de mis padres».