Movistar+ estrena ‘Rapa’, la Galicia de ‘thriller’, con Javier Cámara
▶ Los creadores de ‘Hierro’ comienzan su nueva propuesta con un asesinato
Pepe Coira y Fran Araújo, los creadores de Hierro, cambian ahora las aguas y el paisaje de la isla canaria por la agitada costa gallega en Rapa, su nueva serie para Movistar Plus+ que la plataforma estrena, del tirón, hoy jueves. Como ocurrió en la ficción protagonizada por Candela Peña, un asesinato será el punto de partida de la historia: en este caso, el de la alcaldesa de la localidad coruñesa de Cedeira, Amparo Seoane (Mabel Rivera), una mujer poderosa que tenía más enemigos de los que podría parecer en un primer momento.
El testigo que la encontró moribunda, un profesor de Literatura interpretado por Javier Cámara, estará en el centro de la trama. Se involucrará de tal manera en la investigación que llegará a ser un incordio para la sargento de la Guardia Civil al frente del caso (la actriz Mónica López), pero también una buena fuente para encontrar nuevas pistas que desencallen el caso.
«Tomás es alguien que va un poco a lo suyo, bastante tocapelotas, incluso puede parecer una persona desagradable», dice Javier Cámara de su personaje, un hombre que ve en este caso la oportunidad de experimentar en carne propia lo que tanto tiempo lleva leyendo en las novelas negras que tanto le gustan. «A la sargento la saca de quicio. Pero lo más bonito de su relación es que se tienen que llevar bien porque deben hacer equipo», añade el actor, en un registro muy diferente al de serie Vota Juan.
Uno de los elementos distintivos de Rapa es que el espectador conoce la identidad del asesino mucho antes que los protagonistas, lo que hace que el interés de la trama radique en atar cabos para descubrir los motivos del móvil que han llevado al culpable a cometer el crimen. «El hecho de que el espectador tenga más datos que los investigadores me parecía curioso. Y esa era siempre mi gran duda. ¿La gente querrá saber más?», confiesa Cámara.
Fran Araújo, por su parte, reconoce que esa fue siempre su apuesta, aunque sabían que podía ser arriesgada. «Queríamos establecer una especie de juego con el espectador donde todo el rato fuésemos en contra de sus expectativas», explica sobre una serie cuyo título hace referencia a una tradición gallega que ellos muestran en pantalla, la de la rapa das bestas, y que les sirve también como metáfora.
Se trata de una fiesta, cultural y turística, que se celebra en varias localidades gallegas y que consiste en cortar las crines de los caballos en los curros (recintos cerrados donde se recogen los caballos). Los caballos son recogidos en el monte jornadas previas a la rapa y se concentran en lugares próximos desde donde son llevados en grupos al curro. «Hay algo simbólico, salvaje, de la bestia que todo el mundo puede llevar dentro», apunta Araújo. Y precisa que «en Rapa se retrata esa zona del norte que está entre dos mares sin caer en los tópicos de la Galicia siempre lloviendo o bajo una intensa bruma».
Como ya ocurrió en Hierro, el folclore está presente en esta historia, igual que el paisaje, que marca la trama y el carácter de los personajes. «Las tradiciones forman parte de la identidad de ese lugar, del alma de la gente», señala Araújo. Por eso incide también en los tejemanejes de la política municipal como reflejo del retrato de esa Galicia «contada desde el realismo, no desde los tópicos».
Lucía Veiga, Eva Fernández, Toni Salgado, Ricardo Barreiro, Berta Ojea y Jorge Bosch son otros de los actores que participan en los seis episodios de Rapa, dirigida por Jorge Coira y Elena Trapé.
Sus creadores no descartan que, si funciona, podría tener más temporadas, aunque sería con otra historia, porque este caso queda cerrado, algo que para el espectador puede que no quede tan claro. Araújo tiene una justificación: «La vida pasa de muchas maneras, y es mucho más abierta que las ficciones».
«Ojalá podamos volver para una segunda temporada», decían por su parte los actores Mónica López y Javier Cámara en la presentación que se hizo en el teatro Jofre de Ferrol esta semana. Y es que parece que los paisajes de la costa de Cedeira y los adoquines y edificios modernistas de Ferrol han cautivado a los protagonistas y al resto del equipo artístico de la serie, que esperan que ese efecto Ferrol mola pueda trasladarse también al espectador y podamos asistir a una segunda parte de este thriller a la gallega.
En la serie, el espectador conoce la identidad del asesino mucho antes que los protagonistas