En vias de una nueva etapa
Madrid y Rabat quieren intensificar la relación comercial y la presencia de empresas españolas en los proyectos estratégicos planificados por el país magrebí España aspira a ser «un inversor de referencia»
Marruecos abre la puerta a las empresas españolas para las inversiones en sectores estratégicos que tiene previsto desarrollar las próximas tres décadas. La Reunión de Alto Nivel (RAN) con España celebrada ayer en Rabat estuvo marcada por una extensa agenda y anuncios en clave comercial. Ambos gobiernos insistieron que este aumento de inversiones e intercambios va a vertebrar la nueva hoja de ruta de «entendimiento» y «confianza» escenificada durante el encuentro bilateral.
La Moncloa defendió que las buenas relaciones entre gobiernos ayudará a las empresas a entrar en nuevos proyectos. El Ejecutivo marroquí también animó al sector empresarial a formar parte de esta nueva etapa entre Madrid y Rabat. «Las relaciones bilaterales están experimentando una evolución cualitativa que exige la implicación de los operadores económicos en esta dinámica», manifestó el primer ministro marroquí, Aziz Ajanuch.
El mandatario también puso en valor que España se ha convertido en el primer socio comercial y económico de Marruecos, y expresó que la intención es ir más allá de los intercambios comerciales y «abarcar proyectos comunes de alcance estratégico». Según Ajamuch, esta asociación abre la puerta a «numerosas oportunidades para ambos países hacia mercados prometedores, especialmente en África». Parte de esta estrategia para aumentar la relación comercial se desarrollará «aprovechando la nueva carta de inversiones de Marruecos», concretó el actual jefe del Gobierno marroquí.
El país magrebí tiene previsto destinar 45.000 millones de euros en diferentes proyectos hasta 2050. Esta carta de inversiones aspira a convertir a Marruecos en un polo continental e internacional de inversiones extranjeras directas, además del desarrollo económico de las diferentes regiones del país en las que hay más dispa
ridades. Una de las iniciativas en la que las empresas españolas podrían participar, según explicó el Gobierno español, son los ferrocarriles regionales. Aunque también otros sectores como la construcción de desaladoras, la agricultura y las energías renovables. La Moncloa aspira a que España sea un «inversor de referencia» para desarrollar estos proyectos.
«Avance armónico»
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, defendió que se han establecido las bases para «una asociación económica avanzada, que desarrolle nuevos proyectos de inversión que acompañen el extraordinario proceso de desarrollo que está experimentando Marruecos».
«Debemos asegurar un avance armónico en todos los ámbitos: más diálogo político y de seguridad, más inversiones, intercambios e interconexiones, más movilidad y comunicación entre nuestras sociedades», añadió.
Desaladoras
En la declaración conjunta, se remarcó la importancia de las energías renovables y los recursos hídricos, especialmente en el contexto actual de cambio climático e incerteza energética.
Sobre la gestión del agua y la desalación se han firmado tres memorándums. También apostaron por «la necesidad de seguir desarrollando la conectividad e infraestructuras, y por facilitar la movilidad entre los dos países».
Entre los acuerdos, se duplicará, de 400 a 800 millones de euros, la partida del Gobierno español para financiar empresas que quieran invertir en el país alauí y acentuar la cooperación a nivel turístico,