El Periódico Aragón

Con los dedos de la mano

Antonio Nadal

-

Se cuenta con los dedos de la mano de diferente manera según el país al que se pertenece, leo en un diario que explica la BBC. Este hábito se llama «dactilonom­ía» y es algo que nos sale natural, casi automático. Es el método de contar más antiguo. Se cree que ya fue utilizado en la prehistori­a.

El invento de las calculador­as casi terminó con este método de cuenteo, ahora casi inexistent­e. Conocía a una empleada del sindicato vertical que al no disponer de calculador­a contaba con los dedos de ambas manos antes de poner una cifra en un documento. Un maestro al que conocía utilizaba los nudillos de una mano para calcular el número de días de cada mes, y creo que aún hay personas que lo hacen. Cuando algo se cuenta con los dedos de la mano es que es muy escaso. Cuando cuento con los dedos de la mano empiezo por el meñique y termino en el pulgar, algo que se hace en Oriente Medio. Dice un informe que empezar a contar por el dedo índice, seguir con el anular y terminar en el pulgar es común en algunas partes de Europa, EEUU y Canadá. En Japón empiezan por el pulgar y terminan en el meñique. Cuando calculamos de esta manera, los dedos se convierten en teclas de una calculador­a.

Los dedos son órganos muy necesarios de nuestro cuerpo. Con el dedo índice señalamos y acusamos. Se elige o nombra a dedo y se viaja a dedo. Cuando estamos a dos dedos de algo, es que nos hemos acercado mucho. Alzamos el dedo para pedir la palabra, para pedir algo o mostrar acuerdo con lo que se propone.

Nos chupamos el dedo si nos mostramos ingenuos y los futbolista­s se lo chupan para dedicar un gol a su hijo. Si demostramo­s no tener dos dedos de frente es por mostrar poco entendimie­nto ante algún problema.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain