Sancionado 30 meses por pegar a dos rivales
El juvenil del Casetas, que le ha expulsado del club, ha sido castigado con dos años y medio de suspensión por las agresiones durante un partido
La Federación Aragonesa de Fútbol oficializó ayer la sanción de dos años y seis meses de suspensión para el jugador juvenil que golpeó en repetidas ocasiones a dos futbolistas rivales en el Casetas-Marianistas, de Segunda Juvenil, del pasado fin de semana disputado en el San Miguel, campo de fútbol del conjunto casetero.
La resolución dictaminó lo siguiente: «Dos años y seis meses de suspensión por agredir a dos jugadores del equipo contrario, a uno de ellos estando en el suelo, llevando a cabo ambas acciones con inequívoco propósito de causar daño, originándoles lesiones que constan en los partes facultativos que figuran en el expediente», publica la federación.
El jugador, perteneciente al equipo local, agredió a los dos deportistas del Marianistas a través de una serie de puñetazos y patadas, causándoles lesiones que les enviaron al hospital y que recoge la propia federación en su comunicado y entre las que se encuentran golpes en la cara y en las costillas y una infección en el riñón.
Los hechos se produjeron en un partido que hasta ese momento transcurría con tranquilidad, cuando el agresor se enzarzó con un jugador rival, golpeándole y tirándole al suelo. Ahí, el futbolista del Marianistas recibió una serie de golpes en el tronco y un compañero acudió a socorrerle, siendo igualmente golpeado en la cara y las costillas.
De igual modo, el dictamen de la Federación Aragonesa de Fútbol recogió que «se ha tenido en cuenta el agravante de reincidencia» a la hora de valorar la cuantía de la suspensión para el joven, que fue expulsado del Casetas tras los hechos y que ya fue sancionado con tres partidos al principio de la presente temporada por «emplearse violentamente con ocasión del juego o como consecuencia directa de un lance de aquel», según la federación.
La histórica sanción recibida por este juvenil se engloba dentro de la política con la que la Federación Aragonesa de Fútbol está castigando este tipo de acciones últimamente con el fin de erradicar la violencia de los campos de fútbol de Aragón, más si cabe en el deporte base. Entre otro tipo de sanciones como la del ya exjugador del Casetas se encuentran las que recibieron los futbolistas infantiles del Alfindén tras un partido de esta temporada ante el Cristo Rey.
Por otra parte, el partido, que fue suspendido por el árbitro por los hechos acontecidos, ha sido considerado como «terminado con el resultado de 0-0 logrado hasta el minuto que fue suspendido por el árbitro debido a los hechos» por la federación.
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