La gala del Met revive el legado del Karl Lagerfeld
Penélope Cruz, la primera anfitriona española de la cita, fue una de las más espectaculares
Aunque decía que «la moda no pintaba nada en un museo», porque odiaba las retrospectivas, Karl Lagerfeld también dejó para la posteridad esta lapidaria cita: «No me gusta la belleza estándar, no hay belleza sin extrañeza». Quizá el káiser de la moda, mítico director de Chanel, se esté revolviendo en su tumba (falleció el 19 de febrero de 2019, a los 85 años) al saberse tema de A line of beauty, la exposición que el Instituto del Traje del Museo Metropolitano (Met) de Nueva York dedicará del 5 de mayo al 16 de julio al diseñador alemán, pero también puede que anteayer, primer lunes de mayo, aplaudiera con las orejas el desfile apoteósico, extravagante, elegante y nada discreto que le dedicó la élite de la moda, el cine, la música y el postureo en general. La exclusiva Gala del Met, que por primera vez tuvo a una española, Penélope Cruz, entre sus anfitrionas.
Asimismo, Anna Wintour, editora de la revista Vogue y suprema sacerdotisa de la moda, invitó este año a copresidir este aquelarre de vips, también conocido popularmente como «los Oscar de la moda», a la actriz Michaela Coel, a la leyenda del tenis Roger Federer y a la cantante pop Dua Lipa.
No fue esta gala del Met más atrevida ni desvergonzada –en los últimos años, ese premio se lo lleva la del 2019, dedicada al Camp–, pues se impuso el sempiterno bicolor blanco y negro del uniforme de Lagerfeld (pelo blanco, gafas oscuras, camisa blanca y traje negro), pero sí una de las más elegantes, con algunas divertidas excepciones, como Jared Leto, siempre transgresor, que se disfrazó de la gata Choupette, la minina influencer que el modisto dejó huérfana hace cuatro años. También fue la gala de los segundos embarazos: Rihanna lució el suyo con un diseño de camelias blancas y la tenista Serena Williams, enjoyada con muchas perlas, anunció sobre la alfombra que espera otro retoño.
En general, fue una oda vintage,
capitaneada por las supermodelos Carla Bruni, Naomi Campbell y Gisele Bündchen, que rescataron sus antiguos diseños de Chanel (perlas, lazos y tweeds, corbatas, camisas
y bléiseres). Destacaron Penélope Cruz, Rihanna, Bad Bunny, Nicole Kidman, Gigi Hadid, Olivia Wilde,; Anne Hathaway, Manu Ríos, Lily Collins, y Jennifer Lopez.