El 6 de junio arranca la última Evau tradicional
Unos 300.000 alumnos de segundo de Bachillerato se enfrentarán desde el próximo 5 de junio, desde el 6 en el caso de Aragón, a la última prueba de acceso a la universidad en su formato habitual, ya que a partir de 2024 incorporará progresivamente los cambios previstos para ajustarse al currículo mucho más competencial que establece la Lomloe.
La selectividad de 2023 seguirá el mismo modelo que en los últimos años y será el último examen con estas características antes de implantarse el nuevo modelo, cuya entrada en vigor se ha retrasado hasta el curso 20272028. Su principal novedad será una prueba de madurez académica.
A partir de 2024 se irán introduciendo cambios en el examen para alinearse con el currículo de Bachillerato derivado de la última reforma educativa (ley Celaá o Lomloe), que sigue las recomendaciones de organismos internacionales para que el alumnado sepa aplicar de forma realista los conocimientos adquiridos en clase, en lugar de quedarse en la mera memorización de contenidos.
Así, este próximo junio las pruebas para los alumnos que ahora estudian 2º de Bachillerato serán idénticas a las de junio del año pasado y, por tanto, no les afecta ninguna de las modificaciones de la ley Celaá.
El pasado mes de marzo, cincuenta centros de diez comunidades realizaron una prueba piloto orientada a armonizar las pruebas de acceso a la universidad de cara a junio de 2024, con el mencionado carácter competencial. Sin embargo, Aragón no participó en esta primera toma de contacto, que rechazaron en su mayoría las comunidades autónomas gobernadas por el Partido Popular. tras dejar el trabajo fue anulado por el Supremo y todavía hoy, nueve meses de reivindicaciones después, no existe una solución a la merma del poder adquisitivo.
«La carrera profesional es un modelo a potenciar gracias a la nueva colaboración con DGA», explicó ayer Alberto Gil, gerente de la Universidad de Zaragoza, que aseguró que la pérdida del «bono a la jubilación» permitirá «destinar los recursos a la mejora de la carrera profesional de todos los empleados».
«Lo que estamos haciendo es enfatizar la carrera profesional asociada a la experiencia profesional, mientras estás en tu empeño de labor como funcionario», resumió Gil, que advirtió que «toda la Administración pública tiene un problema de jubilación masiva».
Sobre la otra solución, el mentoring, el gerente de Unizar adelantó que es «una convocatoria para aquellas personas que hubieran trabajado en la universidad y pudieran concurrir en 2024, una vez que ya hayan pasado a ser jubilados». Este programa consistiría en que empleados recién jubilados tutorizarían la llegada de nuevos trabajadores, con una serie de reuniones y elaborando una memoria de las actividades realizadas.
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