Teruel presenta cuatro alegaciones a la futura autovía A-40
El consistorio se opone al anteproyecto y su estudio de impacto ambiental
El Ayuntamiento de Teruel ha presentado cuatro alegaciones al anteproyecto y su estudio de impacto ambiental del itinerario por carretera Cuenca-Teruel, autovía A-40/acondicionamiento, variantes y mejoras locales en N-420 y N-330 y reclama al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) que la conexión entre ambas ciudades sea por autovía.
«Sin ninguna duda, la conexión debe ser por autovía, sin perjuicio de que la N-330 tenga que estar arreglada para todos los habitantes de esos municipios», subrayó la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, respecto a la primera de las alegaciones en la que se solicita la solución de autovía frente a la carretera convencional.
Según el Ayuntamiento de Teruel, la autovía colocará a la ciudad en la intersección de dos vías de gran capacidad (autovías A-23 y A40), «lo que supondrá un factor de primer orden para potenciar el desarrollo de Teruel capital y de la provincia en su conjunto».
Teruel reclama también un cuarto enlace para conectar con la carretera de acceso al pantano del Arquillo que supondría, junto con la variante norte propuesta en el nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), actualmente en redacción, un acceso directo al parque empresarial La Paz, a PLATEA y a la N-420 hacia Alcañiz.
Además, permitiría desviar de la variante de Teruel a su paso por la vega la mayor parte del tráfico de vehículos pesados que se dirigen a los polígonos industriales de la ciudad, reduciendo el impacto acústico y mejorando la seguridad vial.
Respecto al tercer enlace, que se situaría al sur de Villastar y que supondría que todos los vehículos con destino Teruel o sus inmediaciones atravesaran el núcleo de población, se propone desplazarlo y ejecutar un ramal que enlace con la obra de mejora de la seguridad vial y de adecuación de accesos en ejecución entre dicho municipio y la N-234.
En su tercera alegación, el Consistorio turolense reclama que el proyectado puente sobre el río Guadalaviar se ejecute con el menor número posible de apoyos, similar a la solución empleada en la autovía A23 para salvar el río Albentosa.
Además, el Ayuntamiento de Teruel reclama la colocación de pantallas acústicas y asfaltos fonoabsorbentes con el fin de minimizar el impacto acústico en el barrio rural de San Blas.
Como cuarta alegación, el consistorio advierte de que no se ha previsto ningún paso inferior en el cruce con la A-1512 que lleva al Aeropuerto de Teruel y a la Sierra de Albarracín, «lo que se entiende como un error que se supone se solventará oportunamente».
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Recreación del edificio que albergará el museo en Teruel.