La precampaña tensiona todavía más la coalición de Gobierno
Las propuestas sobre vivienda y cesta de la compra alejan a PSOE y Podemos Los morados tachan de «infamia» el aval al 20% de la hipoteca lanzado por Sánchez
El PSOE y Unidas Podemos llegan al 28M en el peor momento de su relación dentro del Gobierno. La reciente reforma de la ley del solo sí es sí, para volver a endurecer las penas a los agresores sexuales y evitar así nuevas rebajas y excarcelaciones, ha tensado la coalición como ningún otro en esta legislatura. Por mucho que Pedro Sánchez quiera dar la crisis por amortizada, la herida aún no se ha cerrado. Pero el continuo desfile de anuncios y propuestas en esta precampaña está contribuyendo a empeorar este escenario, con socialistas y morados dejando claro que no comparten las propuestas de sus compañeros en el Ejecutivo en materias como vivienda y el precio de los alimentos.
La diferencia de criterios se hizo especialmente patente ayer, con Podemos empleando descalificativos como «infamia» para referirse a la iniciativa que lanzó Sánchez el fin de semana en un mitin, y que aprobará el Gobierno hoy, para que el Instituto de Crédito Oficial (ICO) avale a los jóvenes y familias con menores a su cargo hasta el 20% de su hipoteca. «No compartimos en modo alguno esta propuesta de Pedro Sánchez –señaló el coportavoz morado, Pablo Fernández–. Cuando Podemos no lidera las medidas en materia de vivienda, las propuestas del PSOE son contrarias al interés general». Para el partido de Ione Belarra, la línea de avales es una «medida de Ana Patricia Botín, que ya ha planteado el PP y es del agrado de Vox». La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, se sumó a las críticas y aseguró que la medida «puede tener consecuencias inflacionistas» y que «va en el sentido opuesto al espíritu de la ley de vivienda».
Desde hace días, Belarra ha hecho de la vivienda uno de los principales choques con el PSOE. A la par que Sánchez ha ido anunciando la construcción de más de 100.000 viviendas públicas, la ministra de Asuntos Sociales no ha dejado de insistir en que eso no soluciona el problema y que lo que se debe hacer es cumplir la norma que aprobó el Congreso hace dos semanas: «Lo fundamental no es solo construir, sino hacer que los promotores privados cumplan y se responsabilicen. Ese es el verdadero avance de esta ley».
La actitud de los socialistas es distinta. Menos de confrontación, más conciliadora. Pero eso no evitó que poco después de estas críticas de Podemos, la portavoz del PSOE, Pilar Alegría, dejara claro ayer que su partido «no comparte» la medida que había lanzado Belarra el día anterior: un supermercado público para luchar contra el «oligopolio alimentario» (y en especial contra el presidente de Mercadona, Juan Roig) y rebajar el precio de la cesta de la compra. Los dirigentes de Unidas Podemos llevan meses criticando que sus socios no se atrevan a implementar medidas valientes para hacer frente a la inflación del precio de los alimentos. «Estamos a poco más de 72 horas del inicio de la campaña electoral», señaló Alegría, también ministra de Educación, cuando le preguntaron por los ataques de los morados. «Estoy convencida de que Podemos se siente satisfecho con esa política integral sobre vivienda, que hemos trabajado con ellos», insistió.
Los socialistas / atribuyen la reacción de sus socios al contexto político, cuando faltan menos de tres semanas para la cita con las urnas en todos los municipios y la mayoría de las autonomías. El análisis en la sede de Podemos es similar. Así que todo tiene algo de escenificación. También por parte socialista. Al fin y al cabo, ninguno de los dos socios apuesta por romper la coalición en el Ejecutivo central, y tras el 28M intentarán pactar en cuantas comunidades y localidades sea necesario para que la derecha no gobierne.
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