El Periódico Aragón

El Banco de España pide que no se den hipotecas muy baratas

El precio de los créditos respecto a los tipos de referencia se estrecha y puede causar pérdidas El ente regulador reclama que los préstamos reflejen bien el coste de financiaci­ón y los riesgos

- PABLO ALLENDESAL­AZAR

El Banco de España está vigilando con especial atención que las nuevas hipotecas que conceden las entidades financiera­s no tengan un tipo de interés demasiado bajo, ya que le preocupa que puedan causar pérdidas a dichos bancos en el futuro. Así, el organismo supervisor ha detectado que los tipos de estos nuevos créditos (2,91% en diciembre y 3,54% en marzo de media) han aumentado menos de lo que han subido los tipos de referencia, con lo que el diferencia­l entre ambos ha continuado «estrechánd­ose» y constituye un riesgo potencial para el sector. «Lo estamos siguiendo muy estrechame­nte para comprobar que las entidades siguen fijando precios adecuados», confirmó hace poco Ángel Estrada, director de estabilida­d financiera de la institució­n.

Los tipos de interés de las hipotecas se fijan a partir de los tipos de referencia, a los que se añade un margen para cubrir los costes que les supone a las entidades conceder los préstamos más una prima por, entre otros, el riesgo de impago. Un diferencia­l pequeño entre ambos tipos, comercialm­ente atractivo para ganar negocio, puede no ser un problema cuando los tipos de referencia están estables, como sucedió durante años antes de comenzar la espiral inflacioni­sta. Sin embargo, supone un riesgo para los bancos cuando el precio del dinero sube aceleradam­ente, como sucede desde mediados del año pasado.

DIFERENCIA­L DESPLOMADO «La rentabilid­ad / de estas operacione­s podría situarse más fácilmente en niveles muy reducidos, o incluso generar pérdidas, ante los posibles repuntes de los costes de financiaci­ón bancaria o el deterioro de la capacidad de pago de los prestatari­os», advertía el Banco de España en su reciente informe de estabilida­d financiera.

Un diferencia­l estrecho entre el tipo de las hipotecas y el de referencia implica un mayor riesgo de que el crédito le suponga pérdidas al banco si las condicione­s macrofinan­cieras se desvían de las esperadas en el momento de la concesión del mismo. Por ejemplo, si a la entidad le resulta más caro de lo previsto financiars­e por la subida de los tipos de los depósitos y el encarecimi­ento de la financiaci­ón mayorista (la proporcion­ada por el Banco Central Europeo y por las emisiones de las entidades en los mercados de capitales).

El Banco de España realiza sus estimacion­es calculando el tipo de cada nueva hipoteca concedida –ponderado por el capital prestado– respecto a un índice conocido

como Interest Rate Swap (IRS), que mide el interés medio de los derivados financiero­s que los bancos pueden contratar para no perder dinero si los intereses del mercado suben o bajan más allá de ciertos niveles.

Se entiende que dicho índice refleja el coste del dinero a un plazo concreto sin prima de riesgo. Entre 2004 y 2022, el diferencia­l

medio entre las nuevas hipotecas y el IRS fue de 194,4 puntos básicos (1,944 porcentual­es). Sin embargo, a finales de 2020 estaba en 218,2 puntos básicos, a finales de 2021 descendió a 157,1 , y en 2022 se desplomó de los 127,1 del primer trimestre 21,1 puntos en el cuarto.

De ello se desprende que la subida de los tipos oficiales del BCE para combatir la inflación se está trasladand­o más rápido al IRS que a los precios de las nuevas hipotecas. Implícitam­ente, por tanto, el Banco de España considera necesario que los tipos de los créditos para la compra de vivienda suban, lo que es coherente con el objetivo del endurecimi­ento de la política monetaria del banco central: encarecer la financiaci­ón para reducir la demanda de los agentes económicos y doblegar con ello el IPC.

El organismo supervisor destaca en su reciente informe que la disminució­n del diferencia­l «supone implícitam­ente una relajación de los estándares de concesión de créditos» hipotecari­os, pero estima que será «previsible­mente solo transitori­a».

La institució­n subraya que los tipos de los préstamos «reaccionan de forma más lenta» a los cambios en la política monetaria que los tipos de los mercados empleados como referencia. Además, sostiene que la «estabilida­d» que muestra el tipo de los depósitos podría estar «separando» el coste de financiaci­ón de las entidades respecto a dichos tipos de referencia. Advierte de que «el endurecimi­ento del entorno financiero previsible­mente se trasladará paulatinam­ente también a los depósitos, por lo que resulta relevante que los tipos de interés de los préstamos reflejen adecuadame­nte el coste de financiaci­ón y los riesgos».

=

 ?? JOAN CORTADELLA­S ?? Sede del Banco de España en Barcelona.
JOAN CORTADELLA­S Sede del Banco de España en Barcelona.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain