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Con 37 tantos, el Zaragoza de Escribá lleva camino de ser el menos goleado en más de 50 años El equipo suma 15 partidos dejando su portería a cero, 10 de ellos con el valenciano =
La seguridad defensiva lleva tiempo presidiendo el manual de estilo de un Zaragoza al que tanto JIM como Carcedo y Escribá veían creciendo a través de la solvencia en retaguardia. Así sustentó el alicantino una milagrosa salvación que llegó a través de marcadores ajustados y de echar el cerrojo a una portería que ha vuelto a ser el epicentro de todo esta campaña, sobre todo, a raíz de la llegada de Escribá al banquillo zaragocista.
La proclama fue diáfana desde el principio. También esta vez la supervivencia y el crecimiento pasaban por un candado sobre el que debía construirse todo. «Hemos recuperado la seguridad defensiva, que es lo que nos había hecho fuertes en los dos últimos meses», expuso el valenciano al término del partido contra el Cartagena. Así fue.
El Zaragoza, de hecho, lleva camino de hacer historia en este apartado. Porque los 37 goles que ha encajado el conjunto aragonés en 40 partidos apuntan a ser una de las mejores marcas de la historia reciente y, por consiguiente, la mejor tras el último descenso.
Hasta ahora, los 43 goles encajados a la conclusión de la temporada 20-21 son la marca a batir en estas diez campañas consecutivas que el cuadro aragonés acumula en Segunda División. El registro, afectado por el 0-5 encajado en el último partido de la temporada regular ante el Leganés, se ve ahora seriamente amenazado. De hecho, el Zaragoza de Escribá debería recibir media docena de goles entre las dos últimas jornadas para igualar aquella cantidad.
Si el Zaragoza es capaz de cerrar su portería en los dos partidos que restan, firmará los mejores números defensivos desde hace más de medio siglo. Mejoraría, incluso, los 34 tantos recibidos en la campaña 85-86, con el equipo en Primera División. Pero, entonces, la categoría la conformaban únicamente 18 equipos, por lo que solo se disputaban 34 encuentros. Es decir, aquel Zaragoza encajó un tanto por duelo, una media superior a los 0,88 que luce el actual
Zaragoza de Escribá.
Solo los 31 goles encajados a lo largo del ejercicio 71-72 (en Segunda) mejoran lo presente. Entonces, la categoría de plata estaba compuesta por 20 equipos (38 partidos), lo que supone una media de 0.81 goles por choque.
Cristian Álvarez se ha acostumbrado a cerrar su portería, algo que ha ocurrido hasta en 15 ocasiones a lo largo de la temporada, es decir cerca del 40% de todos los encuentros disputados por el Zaragoza este curso. En diez de esos 15 choques, el inquilino del banquillo aragonés era Fran Escribá.
Y eso que hacía más de un mes desde que la escuadra blanquilla no acababa un partido sin recoger el balón de su portería, algo que logró el pasado sábado ante el Cartagena y que no había hecho en los cinco partidos anteriores (victoria 4-1 ante el Racing, 1-1 frente a Eibar y Las Palmas y 2-1 en el Tartiere ante el Oviedo).
El Zaragoza, que ha permanecido imbatido el doble de veces (10) en casa que como visitante (5), ocupa actualmente la zona media de la clasificación tanto en lo que respecta a goles a favor (39) como en contra (37). Solo ha recibido más de un tanto en nueve partidos y únicamente en dos (1-4 ante el Alavés y 3-0 contra el Málaga, ambos en La Romareda) le hicieron más de dos.
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