Piden un centro solo para mujeres
El Centro de Solidaridad de Zaragoza ve necesaria la creación de una otra Comunidad terapéutica y de la puesta en marcha de más pisos supervisados, pero sobre todo, reclaman un espacio exclusivamente femenino (el actual es mixto) con entre 12 y 15 plazas, un proyecto que ya han presentado al Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón, con el que conciertan las plazas (alrededor de 1.500 por persona y 900 en el piso tutelado).
Las mujeres atendidas por Proyecto Hombre son un 20% del total, aproximadamente, reconoció Sánchez, que considera que «el género condiciona mucho» y aunque la actual residencia «es totalmente segura» beneficiaría contar con un espacio solo femenino porque como en la sociedad en general «son ellas las que salen perjudicadas». Para Sánchez, «no se trata de un gasto sino una inversión».
Una mujer con una adicción es «totalmente estigmatizante» ya que es ella la que cuenta con familiares a su cargo, por lo que existe el denominado «silencio clínico». Esto es que cuando ellas piden ayuda la adicción ha persistido durante 15 o 20 años por lo que «llegan con un deterioro tremendo».
No tienen cuantificado cuánta inversión sería necesaria, ya que hasta ahora la residencia de Miralbueno es su única propiedad y el resto son prestaciones pero en cuanto tengan el visto bueno de la administración «se pondrá en marcha», aunque reconocen que depende de «los presupuestos». «Si nos dan el empujón económico» se pondrá en marcha, reconoció Pilar Aznar, ya que el inmueble no sería difícil de encontrar y cuentan con «grandes profesionales».
La presidenta Ejecutiva fue también la encargada de dar a conocer las cuentas de la Fundación, que contó con un déficit de algo más de 82.000 euros –con ingresos de casi 1.600.000 euros y gastos de casi 1.700.000– porque «a pesar de la generosidad de todos «los recursos siempre son escasos», en un momento en el que ha aumentado la inflación, los carburantes y disminuido las donaciones individuales y las subvenciones.
En septiembre del año pasado, gracias a la renovación del acuerdo con el Gobierno de Aragón, se inauguró un piso supervisado con cinco plazas cuyo objetivo es el de la «reinserción» porque muchos de los usuarios de la comunidad terapéutica tienen déficit de apoyo familiar y de trabajo, así que sería como un «piso de transición». Hasta la fecha han vivido en el siete personas y la estancia es «de inicio de tres meses que puede ser renovado», ya que se mantiene el seguimiento de las unidades ambulatorias.
La atención de Proyecto hombre se extiende también a la población reclusa, con 105 atenciones en Zuera y 16 derivaciones a la Comunidad Terapéutica; y a las familias, con casi 400 atenciones, en muchas ocasiones relacionadas con jóvenes ya que quienes realizan la petición son «las familias, ya que ellos no creen que necesiten tratamiento».
La prevención también es importante, y en el último año han dado formación a 23 instituciones (unas 500 personas). Además, Sánchez anunció que este año se va a poner en marcha un importante plan de prevención laboral con FCC para realizar «un análisis de la realidad del consumo de sustancias, pero también de sensibilización», concluyó.
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45 plazas pero ahora tiene lista de espera