España cita a las tecnológicas para evitar la adicción a las redes
Garzón se reunirá con TikTok o Instagram para acordar posibles límites
Mientras en Estados Unidos varias escuelas han demandado a las tecnológicas por dañar la salud mental de los más jóvenes, en España el ministro de Consumo, Alberto Garzón, se ha puesto en contacto con los responsables de TikTok, META (Facebook e Instagram), Twitter, YouTube y Google+
para tratar con ellos las repercusiones que estas plataformas digitales están teniendo en la salud mental, en especial de los más jóvenes.
Las empresas tecnológicas se han mostrado dispuestas a mantener ese encuentro y se está buscando una fecha «a la mayor brevedad posible», con el fin de «avanzar en medidas de protección frente a los efectos nocivos que el uso sin control [de las redes sociales] puede provocar en la población más vulnerable», según precisan desde Consumo.
El propio ministro explicó el pasado viernes que España no se plantea prohibir estas plataformas, como Montana, en Estados Unidos, si no «buscar una solución técnica» que evite el uso compulsivo por parte de algunos jóvenes y menores. Será uno de los asuntos que formarán parte de la presidencia española de la Unión Europa, en busca de que las tecnológicas «tomen cartas en el asunto».
Alberto Garzón ya ha trasladado a los responsables de las plataformas que determinados aspectos de su diseño, como la reproducción infinita de vídeos de la misma temática, pueden tener repercusiones en la salud mental porque promueven la liberación constante de dopamina, lo que puede inducir a comportamientos compulsivos que podrían llegar a ser considerados clínicamente como adictivos.
«Están diseñadas para retenernos en el uso de la aplicación el mayor tiempo posible [...] y en los jóvenes supone un problema grave porque están en una edad donde se desarrollan las habilidades sociales», explicó el titular de Consumo.
En su opinión, el diseño es parecido a los mecanismos que operan en las denominadas adicciones sin sustancia, como los juegos de azar y las apuestas online, que el
Ministerio de Consumo ha tratado ya de desincentivar entre los jóvenes, prohibiendo su publicidad fuera del horario de madrugada.
Asimismo, el diseño de redes sociales como TikTok o YouTube, según ha trasladado el ministro de Consumo a las plataformas, fomenta la desconexión de la realidad, dificulta que la juventud desarrolle adecuadamente su capacidad cognitiva o aprenda a manejar la frustración y las emociones.
Por último, Garzón les ha trasladado las evidencias sobre los perjuicios en la salud mental que provocan en los usuarios enganchados a estas redes, como son cuadros de ansiedad, depresión, soledad, baja autoestima o trastornos del sueño.