El Carmen encamina a 76 personas hacia la inserción laboral
La obra social de la parroquia abrió el año pasado un centro de día, con 485 atenciones Una de cada cinco personas que acuden diariamente al comedor social son mujeres
Lograr un empleo estable es el primer paso hacia la inclusión, ya que permite cubrir necesidades, mejorar la autoestima y ser autónomo. Uno de los proyectos de la Obra Social del Carmen es el de la inserción laboral, que a lo largo del año pasado logró, gracias a las entidades colaboradoras, que 92 personas consiguieran un empleo; y 76 de ellas lo hicieran de forma estable; cifras muy superiores a las de antes de la pandemia (23 en 2019). Una persona «ya es un éxito», asegura Antonio de la Vega, coordinador de la Obra social, que ayer presentó la memoria de actividades, y entregó un reconocimiento a todos aquellos que hacen posible y visibilizan su trabajo, entre ellos EL PERIÓDICO DE ARAGÓN.
«Seguimos en cifras de covid», asegura; ya que desde la obra social pensaban que tras la pandemia «volveríamos a la situación inicial, con unas 370 personas atendidas diariamente», sin embargo, son casi 450 a las que asisten día a día en uno de los 18 proyectos que tienen en marcha. «La gente que está en la calle no ha remitido», asegura, y «siguen necesitando ayuda.
Reconoce De la Vega que lo que más se conoce es el comedor social, quizá porque es el primer proyecto de la obra social, nacido hace ya 45 años; pero sus proyectos se estructuran en tres aspectos: «primero acogemos, luego acompañamos e integramos». Y para ello cuentan con 21 profesionales y 300 voluntarios.
El objetivo final es la integración, pero se encuentran con muchos problemas porque en el caso de los migrantes «no es menos de tres años». La vivienda es otra de las dificultades a las que se enfrentan; de ahí que soliciten que «se puedan acortar los plazos».
En 2022 cumplieron objetivos y para el 2023 se mantienen los mismos: trabajo con otras entidades, mejora continua, darse a conocer, buscar vías de reinserción laboral, cultivar la formación, compromiso con el desarrollo sostenible y la «sostenibilidad» porque, asegura el coordinador general que la capacidad es «limitada».
Los números dan / una señal de la importancia de la labor de la obra social. En el apartado de acogimiento, en 2022 hubo 1.440 atenciones personales, 267 personas asistieron diariamente al comedor social; 73 familias recibieron ayuda en comida y se entregaron más de 1.500 lotes de ropa.
El proyecto número 18, puesto en marcha el año pasado, fue el Centro de día, por el que han pasado 485 personas diferentes (255 españolas, 85 europeas, 96 africanas y 49 americanas). Muchas personas «hacían cola en el comedor» y de ahí surgió la idea de en el mismo edificio contar con un centro como «refugio y acompañamiento» que también se ha encaminado a centro de integración laboral y formación. Pero en esta labor de acogimiento también incluye el alojamiento (74 personas, la mitad menores), viviendas (30 hombres, 20 mujeres y 28 niños) y casas abiertas (15 hombres y 6 mujeres).
En cuanto a la inserción laboral, 21 personas participaron en los programas de rehabilitación de alcohol, 42 menores en el centro de educación infantil, 34 en apoyo escolar; 156 adultos recibieron atención psicológica; y 116 participaron en los programas de formación, que desembocaron en 76 personas que lograron un empleo estable y por tanto su inserción en la sociedad. Las personas atendidas son «de todos los países» porque el lema de la obra social es «las personas: nuestro centro de atención». Sin embargo, sí que destaca que la presencia de la mujer en la calle se ha incrementado de un 8 a un 18%; y pone como ejemplo que una de cada cinco personas que acuden al comedor social son mujeres.
«Nuestro ADN es la integración social y laboral», insiste Antonio de la Vega, aunque también tiene claro que «lo que se ve es el comedor». Pero para lograr llevar a cabo todo su trabajo son necesarias las colaboraciones con las entidades para favorecer esa integración; también con los empresarios que hacen posible el plan de formación.
Para agradecer su labor, además de la presentación de la Memoria de trabajo de 2022, ayer se entregó una placa a todos aquellos que visibilizan su trabajo, entre ellos este diario, que recogió el director Nicolás Espada; pero también a entidades y particulares que ayudad también a la financiación de esta obra social que día a día atiende a 441 personas que luchan cada día por una vida mejor.
pilares principales: acoger, acompañar e integrar