«Me dejó muy tocado el relato sobre los que no volvieron»
Juan Antonio Bayona visitó ayer Zaragoza con ‘La sociedad de la nieve’
incide en los que no volvieron», añadió. No se había contado desde este punto de vista y «había algo pendiente que mostrar».
Por este motivo Numa Turcatti es el narrador. «Poner en el centro del relato a alguien que nunca lo había estado es una declaración de intenciones», subrayó. El director contó que Numa es una persona recordada con «mucho cariño» por los supervivientes. A ellos, Bayona los entrevistó ya en 2018 y pudo conocerlos, esto le ayudó en el momento del castin. «Buscaba cierto parecido físico, pero no era la prioridad. Sobre todo quería encontrar similitud en las personalidades», subrayó.
El director piensa que la película es «bastante fiel» a lo que sucedió. «Ha sido curioso porque hemos conseguido que el funcionamiento del grupo sea muy parecido. Ha habido una piña muy fuerte», señaló. Las localizaciones naturales, la grabación cronológica y el contacto cercano que tuvo con los supervivientes y las familias de los fallecidos, todo esto en conjunto, «ha sido muy bueno» para el realismo que tiene la película.
Con ello, han conseguido que los actores hayan creado su propia sociedad de la nieve. «Cuando un personaje fallecía, el que lo interpretaba se iba y ellos mismos, al rodar, sentían la pérdida del compañero que se marchaba. Esto ayudaba mucho», relató Bayona. Las condiciones de rodaje fueron «muy duras», tenían que estar adaptándose constantemente. Incluso algunos de los actores junto a Bayona llegaron a dormir dos noches en los Andes antes de comenzar a grabar para saber cómo fue lo que vivieron. Para el director, fue una experiencia «muy impresionante».
A pesar de la parte documental de la película, lo que realmente llamó la atención de Bayona y donde vio la esencia de la historia fue en su filosofía. «Es una situación tan generosa el entregar tu cuerpo en vida...
Esa idea de que cuando te lo han quitado todo aún puedes tomar la decisión correcta y que esa voluntad va dirigida a los demás y no a uno mismo», subrayó el director. «Era algo muy bello y le daba la vuelta a la situación», concluyó.
Y es que Bayona cree que en esta historia el realismo y la ética van de la mano. «El comportamiento del grupo fue extraordinario», subrayó. «A nivel individual había gestos donde se refleja la condición humana desde un punto de vista mas complejo, pero no tuvieron ningún gesto de maldad en esos 72 días», añadió el director.
Para Bayona, una de las mejores cosas de esta película ha sido haber conseguido que las familias de los fallecidos y los supervivientes se hayan vuelto a unir. Al hablar con ambas partes, se dieron cuenta de que entre ellos había una frontera. Esto es algo que se mitigó después del primer pase de la película el 1 de septiembre. «Les ha ayudado mucho a recuperar la memoria de los que nunca estuvieron en los titulares. Y sobre todo a procesar el duelo que cada uno vivió de una manera y acompañarse juntos», concluyó. todo el mundo. Precisamente para seguir los pasos de estas obras de valor incalculable nace el largometraje documental.
Al pase asistirán José Ángel Guimerá, director de la cinta y Rubén Martínez, protagonista de la ficción de la película, así como varios miembros del equipo como Camino Ivars, directora de producción o Chusé Fernández, compositor de la Banda Sonora Original (BSO).
La cinta aragonesa cuenta con el apoyo de Aragón TV, a través de su línea de Financiación Anticipada, y del Fondo de Inversiones de Teruel (FITE). También recibió una Ayuda al Desarrollo de proyectos del Gobierno de Aragón en el año 2019 y cuenta con el apoyo de la Comarca del Bajo Martín y los ayuntamientos de Híjar y Castelnou.
«Poner en el centro del relato a alguien que nunca lo había estado es una declaración de intenciones»