Leciñena entra en concurso con un pasivo de 14 millones
Un juzgado de Madrid declara la insolvencia, la segunda que sufre la empresa
La empresa zaragozana Leciñena Trailer SL ha sido declarada definitivamente en concurso de acreedores por el Juzgado de lo Mercantil número 7 de Madrid. El pasivo asciende a 14 millones de euros, según ha podido saber este diario de fuentes conocedoras del caso. Se trata de la segunda vez que el histórico fabricante de remolques y semirremolques asentado en Utebo entra en un proceso de suspensión de pagos, lo que abocará al despido de sus 78 trabajadores, buena parte de ellos con más de dos décadas de antigüedad. La compañía, en manos del conocido empresario sevillano Juan Melgarejo a través Partners Connect Holding SL, no ha logrado reflotar un negocio con cuyas riendas se hizo en 2016.
Como ya avanzó EL PERIÓDICO DE ARAGÓN el pasado 17 de octubre, la compañía pasaba por una situación límite por las deudas que ha acumulado en los últimos ejercicios. La dirección había comunicado al comité de empresa su intención de ir al concurso y presentar un expediente de regulación de empleo (ere). Sin embargo, la empresa se resiste por el momento a llevar a cabo un ajuste de personal a pesar de que la actividad productiva de la planta es prácticamente inexistente y de que ha dejado abonar los salarios de los trabajadores desde noviembre, cuando hizo un último pago de 400 euros, según señalan fuentes de la plantilla. A una parte del personal sí se le ha concedido permiso retribuido.
Desde la dirección de la empresa han asegurado en los últimos meses que estaban estudiando otras alternativas para evitar entrar en fallido con la entrada de nuevos inversores, aunque Leciñena Trailer SL se encuentra en preeconcurso de acreedores desde el pasado verano. El propio Melgarejo se reunió ayer con el comité de empresa para explicar la situación, un encuentro en el que siguió defendiendo la posibilidad de que se venda la unidad productiva en el proceso concursal, una posibilidad que desde la plantilla se ve con escepticismo.
La historia se repite en esta longeva industria zaragozana, que atesora casi 60 años de historia a sus espaldas. Hace casi diez años, cuando estaba bajo la propiedad de la familia que fundó el negocio y le puso su nombre, también cayó en un proceso concursal. Entonces, fue como consecuencia de la crisis económica de aquella época, que derrumbó la demanda de remolques y semirremolques. La empresa acabó en una liquidación de la que derivó el cambio de manos de la unidad productiva, que fue comprada por el citado fondo inversor.
/ IMPAGOS A PROVEEDORES La compañía ha llegado a esta situación crítica por los problemas económicos que arrastraba, hasta el punto de que ha paralizado la práctica totalidad de la actividad desde hace varios meses debido a que los proveedores dejaron de servirle material por los impagos que había contraído. Y eso, a pesar de contar con pedidos y carga de trabajo, según aseguran desde el seno de la plantilla.
El auto judicial de la declaración del concurso, de carácter voluntario, está fechado el 27 de diciembre y se publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pa
sado 16 de enero. El inicio del proceso se ha demorado más de lo previsto porque la empresa lo solicitó en un juzgado de Zaragoza, pero la petición fue archivada por «falta de competencia objetiva»
ya desde julio de 2023 ya se había declarado el preconcurso de la sociedad mercantil en el citado juzgado de Madrid, donde está el domicilio social de la firma.