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La alcaldesa, Natalia Chueca, fue la encargada de realizar la visita guiada por el ayuntamiento al primer grupo de visitantes que estaba haciendo fila
Un día antes de lo que hasta ahora mandaba la costumbre, la sede del Ayuntamiento de Zaragoza en la plaza del Pilar abrió ayer sus puertas a la ciudadanía. La encargada de dirigir la primera visita guiada fue la alcaldesa, Natalia Chueca, quien explicó que se han adelantado los actos por el día de San Valero «para poder disfrutar dos días».
No obstante, hay un segundo motivo de peso por el que la alcaldesa recibió a los vecinos de la ciudad ayer y no esta mañana. Y es que Chueca viaja a Madrid para recoger un premio de la mano de la reina Letizia por los avances en materia de accesibilidad impulsados desde hace años en la ciudad. Este galardón demuestra, dijo, que la capital aragonesa «está recuperando influencia» en el panorama nacional. «Soy la alcaldesa de la mejor ciudad del mundo», afirmó la primera edil.
Pasadas las 17.00 horas, la regidora abrió la puerta principal del ayuntamiento para que entraran los primeros visitantes, aquellos que iban a tener el honor de recorrer la casa consistorial de la mano de su actual inquilina.
El tour comenzó por un vestíbulo en el que han descansado este fin de semana los gigantes y cabezudos antes de que hoy salga la comparsa. Subiendo por las imponentes escaleras, Chueca explicó que los bancos allí colocados son los que antaño se situaban en la puerta de las viviendas de los tenientes de alcalde para que la gente supiera dónde vivían y poder dirigirse a ellos para realizar sus quejas y reclamaciones.
La siguiente parada fue la mesa en la que las autoridades y personas distinguidas firman en el libro de honor del ayuntamiento. Los muebles en este espacio son regios y ricos en decoración y ahí está también situada una escultura de un Cristo atado a la columna «del que se desconoce su origen» pero que representa, explicó Chueca, la «importancia» de la Semana Santa en Zaragoza.
En la segunda planta, la noble, la alcaldesa enseñó a los zaragozanos los rincones que normalmente no pueden visitarse, como su despacho y la sala en la que se reúne el Gobierno municipal. En am
bas estancias hay colocados dos artesonados procedentes del palacio de los Marqueses de Osera. En su despacho, los visitantes contemplaron los cuadros del Rey, Agustina de Aragón, la Virgen del Pilar y la fundación de la ciudad. En el salón de plenos, un ciudadano le
propuso a la alcaldesa «montar un debate», Y en el salón de recepciones, los visitantes se interesaron por los cuadros de todos los alcaldes desde 1850. «Falta el de Azcón», dijo un visitante. «Está decidiendo el artista todavía», explicó la alcaldesa.