El Huesca vive un final de mercado tranquilo
El último día no depara sorpresas ni movimientos en la plantilla de Hidalgo, que hace un llamamiento a la afición para ganar al Alcorcón
El último día de mercado no deparó sobresaltos en el Huesca. Los fichajes de Gutiérrez y Elady Zorilla han sido, como ya advirtió el director deportivo Ángel Martín González, los únicos movimientos de club azulgrana que vivió ayer una plácida jornada.
En este sentido, el técnico Antonio Hidalgo aseguró que «el abanico de posibilidades en la parte de arriba se nos abre, hay que gestionar esas posibilidades y elegir los jugadores indicados. Esas cabezas están moviéndose en la dirección correcta. Tienen que mirar por el bien común y saber gestionar esos momentos de frustración. Que las cabezas estén limpias por ese bien común. Poco a poco vamos conociendo lo que queremos y esta semana ya hemos podido trabajar en lo que le pedimos a cada uno en su posición y poco a poco lo van entendiendo. Tienen mucha voluntad y muchas ganas y eso es lo importante».
Hidalgo hizo un llamamiento a la afición para que llene El Alcoraz mañana (16.15 horas) para el choque con el Alcorcón, porque el objetivo de la salvación, ha dicho, «pasa por los partidos de casa». El técnico aseguró que tiene claro que este partido contra un rival directo es muy importante y advirtió de que en El Alcoraz hay que sacar los puntos «de tres en tres».
/
UN RIVAL PELIGROSO Enfrente, el Huesca encontrará un rival en línea ascendente. «Es un equipo que viene con números buenos ante el cambio de entrenador, es agresivo e intenso, y muy competitivo. Además, encaja poco y los resultados les están acompañando. Tendremos que tener concentración máxima, empujar mucho con la pelota e intentar estar en campo contrario», analizó el técnico
azulgrana. Hidalgo quiere que esa necesidad de puntos se traslade en «hambre y ambición, más que en presión».
Por eso, insistió en el mensaje a sus futbolistas a quienes ha dicho: «somos profesionales y sabemos que hay que sumar de tres, hemos conseguido dar la vuelta a la situación y estamos cerca de salir de ahí. Tenemos que tener esa sensación de deseo, ser valientes y atrevidos e ir a por más».
Consciente de la importancia del partido, el entrenador también tiene claro que queda mucho, pero ha incidido en que ante un rival directo el equipo tiene que tener «un plus de hambre y deseo» y que eso se sienta «no como una agonía», sino como «una liberación». «Es importante saber gestionar las situaciones», enfatizó. Para ello, contar con la grada es clave. «La afición es consciente de la situación, y siempre ha apoyado al equipo», agradeció.