El blindaje de los empleos a tiempo parcial tensiona al PSOE y Sumar
Trabajo retoma la fallida reforma de los subsidios del paro
Después de arrancar la legislatura mostrando sus diferencias sobre los subsidios de paro, los socios de Gobierno han vuelto a chocar en público por la transposición de la directiva europea sobre condiciones laborales transparentes. El secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, ha acusado al PSOE de rechazar una mejora de la protección para los trabajadores a tiempo parcial.
El departamento dirigido por Sumar pretende incorporar un veto específico a que una empresa pueda rebajar de manera unilateral el número de horas que tiene por contrato un empleado a tiempo parcial. «Algo tan violento», ya que va en detrimento del posterior salario que le quedará al trabajador, según dijo ayer Pérez Rey tras reunirse con los agentes sociales.
En España hay unos 2,6 millones de ocupados a tiempo parcial, el 73% mujeres. La transposición de la directiva europea obligará a las empresas a detallar al trabajador su sueldo base, los pluses, el horario y el centro de trabajo en el mismo contrato. También incorpora una serie de limitaciones para las compañías en relación a las horas complementarias que pueden hacer los empleados a tiempo parcial, pero en este punto no hay consenso dentro la coalición, según ha exteriorizado el número 2 de Yolanda Díaz en el ministerio.
La previsión de Trabajo era llevar la transposición al Consejo de
Ministros en la primera mitad de febrero, pero las diferencias entre los socios están retrasando su aprobación. La mayoría de sus novedades estaba previsto que entraran en vigor a partir del 1 de junio, pero el real decreto fue tumbado por el voto en contra de Podemos. Ahora, Trabajo ha reabierto esa carpeta dentro del diálogo social para ganar legitimidad.
DESENCUENTROS La reforma de los subsidios, que provocó fuertes desencuentros entre Economía y Trabajo, no fue negociada con los agentes sociales. La norma generaliza la posibilidad de compatibilizar un sueldo con seguir cobrando el subsidio en los primeros 45 días de contrato. Ahora, Trabajo busca incorporar elementos que le trasladen los sindicatos y la patronal.