El campo también existe
En 1985, Joan Manuel Serrat puso música a poemas del uruguayo Mario Benedetti bajo el título El sur también existe:«Pero aquí abajo, abajo / el hambre disponible / recurre al fruto amargo / de lo que otros deciden / mientras el tiempo pasa /y pasan los desfiles / y se hacen otras cosas / que el norte no prohíbe / con su esperanza dura / el sur también existe».
Son versos que estos días me han venido a la cabeza a raíz de las protestas que protagonizan los agricultores. Desde Francia han ido propagándose por todo el Viejo Continente. De la noche a la mañana, en las ciudades nos hemos despertado con la sorpresa de que el campo, con sus agricultores y ganaderos, se ha echado a la calle para denunciar que se asfixia. Que los representantes de esas explotaciones en las que se ingresa menos por producir que lo que cuesta cultivar o alimentar a los animales y de las que depende buena parte de nuestra nutrición, han optado por hacerse notar con columnas de tractores.
¿Qué ha pasado? Pues que acumulan años de descontento al considerarse maltratados. Que se les obliga a competir con unas normas que países terceros, no pertenecientes a la Unión Europea (UE), no están obligados a cumplir. Que sufren unos costes desorbitados en una actividad en la que se mantiene el viejo principio de: «Tú produce que yo ya vendo»; o sea, que resulta más rentable intermediar o comercializar que cavar, labrar o arar para obtener los productos. En resumen, que se incumple la ley de la cadena alimentaria.
La mala situación del campo viene de atrás, pero ahora aflora por los mayores costes, los efectos de la sequía o importaciones con ventajas competitivas. Ha hecho bien el ministro de Agricultura, Luis Planas, en convocar a las principales organizaciones agrarias. El objetivo es aplacar una frustración que puede convertirse en el principal caldo de cultivo para que calen las recetas fáciles para problemas complejos que el populismo de extrema derecha maneja con soltura. Esta vez harían bien los políticos en escuchar el grito de un sector que existe y que debería seguir existiendo.
*Periodista.
La mala situación del campo viene de atrás, pero ahora aflora por los mayores costes o la sequía