Los hermanos «no eran conflictivos»
Castro Urdiales amaneció ayer consternado, y es que no podía ser de otra manera tras haber despertado con la noticia de que Silvia L.G. había sido asesinada la noche del miércoles, presuntamente, por sus dos hijos de 13 y 15 años. La alcaldesa del municipio, Susana Herrán, señaló el miércoles en rueda de prensa que «no consta que haya habido ningún problema con los menores en servicios sociales» y detalló que los hermanos «no eran en absoluto conflictivos», que «tenían la personalidad acorde a su edad» y que son «académicamente excelentes».
La alcaldesa anunció también la decisión del Consistorio de declarar tres días de luto por este suceso, en los que las banderas lucirán a media asta, y la suspensión de las actividades festivas del fin de semana con motivo del carnaval.
Herrán trasladó la solidaridad de todo el Consistorio castreño y de los vecinos del municipio con la familia, y convocó también un minuto de silencio a las puertas del Ayuntamiento a las 13.00 hodios ras. «Es un trágico suceso para los castreños», apostilló la regidora, quien, a su vez, pidió respeto para la mujer y los menores a la hora de informar. «Tenemos que tener todos claro el límite a la hora de hacer preguntas», ahondó la alcaldesa.
La Delegada del Gobierno, Eugenia Gómez de Diego, por su parte, compareció ayer a mediodía y detalló que uno de los menores, el de 13 años, ingresó en la mañana de ayer en un Centro de protección de menores, siguiendo las indicaciones de la Fiscalía de menores, y el de 15 años pasó a disposición de esta misma institución. Los dos hermanos, apuntó, están recibiendo orientación y apoyo.
La alcaldesa señala que los servicios sociales no tenían denuncias asociadas con los menores