Las ayudas a la accesibilidad y el alquiler copan el plan DGA-Estado
La consejería de Fomento replantea los programas estatales para repartir 18 millones euros en 2024 Hubo 8.573 solicitudes para el arrendamiento, muy por encima de la asignación presupuestaria
El plan de vivienda que prepara la consejería de Fomento del Gobierno de Aragón comienza a tomar forma y uno de los cinco pilares consistirá en darle una vuelta de tuerca a los programas estatales, una serie de iniciativas que reparten cuantiosas ayudas (71 millones entre 2022 y 2025) sufragadas por el Estado y las comunidades autónomas para dinamizar la entrada al mercado inmobiliario residencial. El departamento que dirige Octavio López tiene previsto acogerse en 2024 a cuatro de estos planes con 18 millones de inversión para impulsar el alquiler general, el destinado a personas vulnerables, la compra de vivienda en el medio rural para menores de 35 años y las mejoras en accesibilidad.
De este modo, la dirección general de Vivienda potenciará estos cuatro planes que ya estaban vigentes en 2023 al entender que tienen una alta demanda y que podrán completarse con el resto de patas del plan autonómico. Más allá de los programas estatales, el documento que se está confeccionando pivotará sobre los programas propios del Ejecutivo autonómico (incentivos a la oferta y la demanda y ayudas directas a la compra de vivienda), los últimos coletazos de los fondos europeos (sobre todo orientados a la rehabilitación), la nueva ley de Vivienda aragonesa y la directriz que permitirá a los ayuntamientos cambiar el uso de los suelos dotacionales sin uso a residenciales para construir vivienda pública, que estará lista en abril.
La previsión que manejan desde Vivienda es lanzar estos programas de ayudas antes de final de año, aunque podría haber cambios si se apostase por abrir otros planes. El convenio entre la DGA y el Ministerio de Vivienda permite al Ejecutivo aragonés adherirse a 13 programas diferentes. De hecho, cada autonomía puede recurrir al que más le convenga y por eso Aragón trabajará este año con cuatro subvenciones agrupadas: alquiler general y para personas vulnerables, compra de vivienda en municipios de menos de 5.000 habitantes para jóvenes y accesibilidad.
Así, la partida más cuantiosa será
un año más la destinada a ayudar al alquiler para las rentas bajas y medias, entendida como general, que sumó el año pasado 8.573 solicitudes presentadas. En 2024 se repartirán 6,1 millones, de los que la comunidad pone un millón y el resto, el Estado.
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EL ALQUILER Destaca la directora general de Vivienda, María Pía Canals, que el apetito más voraz lo despierta precisamente el programa de alquiler general y el de accesibilidad. «La demanda es altísima para las ayudas al alquiler. En total, las solicitudes suman entre 18 y 20 millones haciendo una estimación de trazo gordo», explica la responsable del departamento.
Sin embargo, fue el programa de incentivos a la mejora de la accesibilidad a las viviendas uno de los que sorprendió a la responsable del departamento. «Se lanzó muy tarde, el 4 de diciembre, y en cinco minutos se gastó el dinero del programa 11, el de accesibilidad. Ese primer día de apertura se solicitaron subvenciones por valor de 18 millones de euros, quintuplicando
la asignación presupuestaria», apunta Canals. Todavía no está cerrado cuánto será el presupuesto para 2024, pero desde la consejería avanzan que será «una gran cuantía de fondos provenientes de otros programas que no se van a abrir». En 2023, tras una modificación aprobada en Consejo de Gobierno de 11 de octubre, su presupuesto se incrementó hasta superar los 4,9 millones de euros para repartir subvenciones a la instalación de ascensores, salvaescaleras, rampas, automatismos para apertura de puertas y demás medidas que faciliten la autonomía y la vida independiente de personas con movilidad reducida, así como dispositivos adaptados a las necesidades de personas con discapacidad sensorial o intelectual.
Por otro lado, las subvenciones al alquiler de personas vulnerables, como víctimas de violencia de género o desahuciados, entre otros, recibirán 1,82 millones de euros en 2024. Es una cifra considerablemente menor a la del año pasado, cuando se destinaron 3,74 millones de euros y se recibieron
841 solicitudes, una cifra que se considera «adecuada a las solicitudes presentadas», aunque desde la consejería se puntualiza que «con una mejor coordinación con los Servicios Sociales municipales y comarcales se podría llegar a tener un mayor número de solicitantes, ya que esta convocatoria requiere informe preceptivo por su parte».
El tercer programa al que se adhiere Aragón se centra en incentivar la compra de vivienda para jóvenes en municipios pequeños. Es una convocatoria centrada en jóvenes de hasta 35 años, para que adquieran su vivienda habitual en municipios o núcleos de población de hasta 5.000 habitantes –computados a 31 de diciembre de 2022–, es decir, la inmensa mayoría de las localidades aragonesas.
El programa no terminó de funcionar en 2023, pues contaba con una dotación presupuestaria de 2,69 millones de los que se ejecutó menos de un millón (969.237 euros) pese a que la dirección general recibió 425 solicitudes. Para este 2024 sele asigna una dotación presupuestaria de 2,32 millones.