El ayuntamiento evitó la liquidación de la fundación de Etopia en 2021
El consistorio le inyectó 200.000 euros tras varios años acumulando pérdidas El Gobierno del PP cuestiona su gestión y duda de la solvencia económica actual
El Ayuntamiento de Zaragoza «evitó» la liquidación y disolución de la fundación encargada de la agenda cultural de Etopia en 2021 inyectándole 200.000 euros extra, además de los 285.000 presupuestados para ese ejercicio. Coincide con el año de la pospandemia, tras un 2020 marcado por la crisis sanitaria y el cierre de los centros durante meses, que abrieron a trompicones, con restricciones de aforo. Para entonces, Zaragoza Ciudad del Conocimiento llevaba tres años acumulando pérdidas, lo que puso en riesgo la viabilidad de la fundación, ahora en el punto de mira.
El Gobierno del PP lleva días señalando a Zaragoza Ciudad del Conocimiento. Primero fue el concejal de Economía, Carlos Gimeno, que achacó el fin de la programación a su falta de «capacidad económica» en declaraciones a este diario, y un día más tarde fue la alcaldesa la que dudó de su «solvencia». Natalia Chueca fue un paso más allá y afirmó que iban a analizar la gestión de la fundación porque, según afirmó, no están cumpliendo «los objetivos».
Por aclarar el papel de la fundación, Zaragoza Ciudad del Conocimiento es una herramienta de capital público-privado que gestiona
un equipamiento municipal, Etopia, y que actualmente se financia gracias a la aportación económica del propio ayuntamiento y los fondos europeos. El resto de patronos (inversores) han dejado de financiar su programa.
El presupuesto municipal reserva alrededor de 200.000 euros anuales para sufragar las actividades culturales y de innovación de Etopia, programadas por la fundación. La horquilla ha variado en los últimos años desde los 200.000 de 2018 hasta los 290.000 de 2022, o los 250.000 del año pasado y de este 2024.
Como adelantó este diario, las ayudas municipales representan el 26% del presupuesto de este año, que asciende a 910.600 euros, mientras que el 50% (446.600) llega
desde Europa, que está financiando 10 proyectos. Por las ventas y prestaciones de servicios ingresa 135.000 euros y 79.000 por subvenciones o donaciones privadas.
Volviendo a las deudas. Para el Gobierno del PP, las pérdidas acumuladas de los últimos cinco años –la fundación tiene diez–, justifican la cancelación de la agenda cultural. Fueron las deudas reiteradas en 2018 (-16.887,75 euros), 2019 (54.682,16) y 2020 (-14.632,3) las que hicieron peligrar su viabilidad en 2021, cuando el ayuntamiento aportó de manera «excepcional» otros 200.000 euros de capital, dado que su «patrimonio era negativo y si no se inyectaba presupuesto se podía incurrir en causa de disolución», según fuentes del gobierno del PP. Gracias a esta inyección, el balance final fue positivo, con 162.750 euros. Un espejismo ya que un año después, en 2022, la fundación volvió a cerrar su ejercicio en pérdidas (-39.339,39). En estas cuentas se basa el PP para poner en duda la gestión de la fundación. Algo que arreció ayer las críticas del PSOE. El domingo, la socialista Lola Ranera anunció que exigirá explicaciones a la alcaldesa por el «desmantelamiento» de Etopia. También ZeC tiene previsto preguntar por el plan del PP en Etopia.
Ayer, Ranera aseguró que «las cuentas son positivas y cuentan con el voto por unanimidad de todos los patronos, así que no entendemos esta decisión», declaró la socialista, que señaló a Vox como el cabecilla de la cancelación de la agenda cultural.