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Daniel Zueras quedó como segundo clasificado en ‘Operación Triunfo’ 2006 «La fama vino de un día para otro», cuenta =
«Fue tremendo cuando pude comprobar la barbaridad y el auge que tenía la televisión. Es alucinante el poder que tiene, cómo arrasa con todo», comienza relatando Daniel Zueras, el zaragozano que quedó como segundo clasificado de la edición de Operación Triunfo de 2006. 18 años han pasado desde entonces y ahora está pudiendo ver desde fuera el movimiento social que ocurría en Zaragoza con el programa. «Me lo habían contado, pero fue algo que no pude vivir al estar dentro del programa», cuenta. Esto es algo que le parece «alucinante» y ya no solo el apoyo a Juanjo y Naiara por la gente de su tierra, sino por «cómo las empresas de todo tipo se suben al tren para sacar beneficio». «Esto es algo que yo también viví y hay un momento en que te sientes un mono de feria, pero bueno, forma parte un poco de todo esto», añade.
Zueras recuerda el programa con cierta nostalgia, aunque sobre si volvería, su opinión se divide en un 80% sí y un 20% no. «La experiencia, independientemente de lo que ocurriera después, bueno o malo, en sí fue una pasada», relata. Por otro lado, «el boom de la fama fue enorme de un día para otro», confiesa. Él mismo había podido testear lo que ocurría, porque igual que en la actual edición, pudieron salir en Nochebuena y para la firma de discos. «Pensaba en quién iba a venir a que le firmara un disco, creía que estaría mi madre y poco más», cuenta el zaragozano. Pero, cuando llegó allí y vio toda la explanada del parquin de Carrefour llena de gente, pudo comprobar que el poder de la televisión, la música y toda la industria es «alucinante».
A pesar de ser consciente de ello, el zaragozano se considera una persona que «ha relativizado todo mucho». «Era muy consciente de todo el poder que tiene la televisión», añade. Anteriormente, con 16 años había ganado otro talent show, que se llamaba Lluvia de Estrellas, y ahí pudo comprobar «lo que suponía ir a un programa, que la gente te conociera y te parase por la calle». Pero, también pudo constatar que «en esa fama hay mucha espuma y puede ser muy esporádico todo eso». «Iba con la cabeza muy amueblada y con mucha sensatez, sabiendo que era importante pero que no podía dejarme llevar solo por eso», relata. Zueras era consciente de que mantenerse en esta industria es «complicado». «Es algo que no solamente se consigue a través de tu talento y de tu esfuerzo, sino de otros factores que no se pueden controlar», añade.
«Me dejé llevar mucho por la experiencia y fue alucinante», confiesa Zueras. Aunque reconoce que con el tiempo todo va normalizándose, «salvo casos muy excepcionales, que han conseguido tener un triunfo, como la propia definición de la palabra, lo que yo he notado es que la gente se acostumbra a verte». Y el zaragozano confiesa que en su edición no se les preparaba mentalmente para esto: «Llegábamos completamente verdes y son experiencias muy chocantes que no son fáciles de gestionar. Nos hubiera venido bien». Actualmente, los triunfitos cuentan con ayuda piscológica en la academia y durante un tiempo después.
El zaragozano no se ha perdido «ni una gala» de esta edición. «Ha habido muy buen castin y que los dos maños se hayan postulado como finalistas te hace seguirlo con más ganas», confiesa.
18 años dan para mucho y el programa ha ido evolucionando a medida que lo ha hecho la sociedad. Zueras en el programa no habló de su vida privada, pero confiesa que «hubiese sido una liberación poder haber sido uno mismo en ese aspecto». «Nos pasó a varios compañeros de la edición, pero en aquel momento la industria no estaba preparada para mostrar a alguien directamente homosexual», continúa. Y el zaragozano hace referencia a Pablo Alborán, también concursante de Operación Triunfo, o Ricky Martin: «Estuvieron muchos años sin poder decir nada y cuando han visto consolidada su carrera es cuando se han podido sentir libres».
El zaragozano todavía sigue vinculado este mundo «tan adictivo», tal y como él define. Actualmente, sigue dedicándose a sus dos pasiones: la televisión y la música. Forma parte del equipo de castin de Factor X y lo compagina con su propia producción musical y conciertos. «La vida me ha demostrado que da muchas vueltas y nunca sabes lo que te puede deparar, entonces, aquí estamos», concluye.
«En la fama que dan los programas de televisión hay mucha espuma y puede ser muy esporádico»