Zaragoza sigue fuera
Daniel Gallardo Marín Zaragoza
La historia está llena de personajes ilustres, grandes genios, que por sí solos han sido capaces de influir en el mundo sea por sus ideas o por su arte. No cabe duda que uno de ellos fue nuestro pintor universal Francisco de Goya. Tal es así que los premios anuales que otorga la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España tienen que ver con la obra pictórica de Goya y su relación con el cine. Probablemente el idilio de Aragón con el cine no tenga parangón. Lugares nuestros escaparates de platos de cine, montañas, desiertos, sierras y castillos. Aquí se rodó en 1899 la primera película que inaugura el cine español, lo haría Eduardo Gimeno con un aparato Lumiére que compró en París. Segundo de Chomón en la primera década del siglo XX, sería quien inició a colorear las películas y creó los efectos especiales. A estos le siguieron otros grandes cineastas como Florián Rey, Buñuel, Borau, Forqué o Saura. Tradición que continúa hoy entre otros como Miguel Ángel Lamata , Paula Ortiz, Pilar Palomero o Gaizka Urresti, aragonés de adopción. Además de ser Zaragoza la única ciudad que cuenta con una Filmoteca municipal, que recupera y conserva todo tipo de material audiovisual. Contribución aragonesa al cine, que nunca ha sido correspondida por la academia. Desde que se crearon los Goya, premios representados con el busto de nuestro genial pintor, siempre se han celebrado en Madrid, con salidas esporádicas gracias al ímpetu de sus alcaldes, a Barcelona, Málaga, Sevilla y Valencia, esta última semana Valladolid y para el próximo año espera Granada. Es frustrante que la fiesta del cine español, que da imagen y prestigio a la ciudad donde se celebra, Zaragoza, la tierra que vio nacer al genio de Fuendetodos, no entra en dichas celebraciones y no será por falta de argumentos para ser elegida.