MLN compra a Endesa la cantera de caliza de la térmica de Andorra
La explotación consta de una planta de trituración y potencial para extraer 15,6 millones de toneladas El grupo ve el proyecto «estratégico» para su futuro y creará un nuevo centro de producción de materiales
La cantera de caliza asociada a la antigua térmica de carbón de Andorra tiene un nuevo dueño. El Grupo MLN, una de las mayores constructoras aragonesas, ha comprado a Endesa la explotación de Horcallana, próxima a la central eléctrica cerrada hace casi cuatro años. Con esta operación, cuyo importe no ha sido desvelado, la empresa familiar refuerza su posición como productor de áridos, hormigones y asfaltos al hacerse con una de las mayores minas de esta roca sedimentaria que hay en activo en la comunidad. Para la compañía es también una oportunidad para asentarse en una zona de interés para su negocio debido al elevado volumen de proyectos que está previsto que se desarrollen en un territorio que está inmerso en pleno proceso de transición energética.
El traspaso de los derechos mineros se formalizó a finales del año pasado tras alcanzarse un acuerdo previo de compraventa entre ambas partes el verano de 2023. El Grupo MLN ya ha empezado a trabajar en la explotación, dando salida al acopio de material que había en la cantera, que se está destinando principalmente a las obras de los viales del nuevo hospital de Alcañiz que está llevando a cabo la constructora.
Para la compañía, se trata de un «activo estratégico» para crecer en esta provincia y el futuro de su negocio. «Hace ya tiempo que veníamos buscando tener un emplazamiento en Teruel porque consideramos que es un mercado interesante», apuntaron fuentes de MLN, que hace tiempo que trabaja en la zona pero no contaba con un centro de producción. «Nos va a permitir acometer otros proyectos con más garantías de buena ejecución», recalcan. El potencial de trabajo en la provincia es elevado ante el aluvión de plantas renovables que está previsto que se construyan o los proyectos de obra civil que asoman en el horizonte. A ello hay que sumar los edificios industriales de las empresas que planean instalarse en este enclave.
La explotación comprende dos concesiones mineras. La primera, abarca ocho cuadriculas de 231 hectáreas; y la segunda, 31 cuadrículas
de 894 hectáreas. En total, más de 1.100 hectáreas. Los trabajos se están realizando ya en un hueco de 30 hectáreas que tiene un potencial de extracción de 20,3 millones de toneladas de material. Después de deducir un 23%
de desperdicio de margas, se estima que las reservas netas de la concesión ascienden a 15,6 millones de toneladas de material. Las instalaciones en la cantera incluyen un edificio de oficinas, dos viales de acceso desde el Parque Em
presarial de Andorra (Pean) y una planta de trituración con una capacidad nominal de 550 toneladas a la hora. Se da la circunstancia de que ubican precisamente junto a la fábrica de cemento levantada por Cemex, que nunca llegó a ponerse en marcha tras haberse ejecutado el 80% del proyecto.
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CENTRO DE OPERACIONES Los derechos mineros se ubican íntegramente en el municipio de Andorra, en el que se proyecta un volumen de excavación de 7,9 millones metros cúbicos. La caliza de este emplazamiento es «especialmente buena» para la producción de asfalto, pero MLN también lo utilizará para hacer hormigón y está ya haciendo pruebas en esta línea. De hecho, tiene previsto instalar una planta móvil para la fabricación de este producto.
La caliza era empleada por Endesa como materia prima en el sistema de desulfuración de los gases de combustión de la térmica de carbón. Esto hacía que la central
fuera el primer productor nacional de yeso, que se obtenía de forma colateral en este proceso industrial.
La extracción de la roca sedimentaria se realiza mediante voladuras, una actividad para la que ya se han solicitado permisos con el la previsión de retomar la extracción de material a lo largo de este año. El objetivo a largo plazo de la empresa es crear un complejo industrial de producción de materiales de construcción similar al que tiene ahora en la localidad zaragozano de Bárboles. Allí se encuentra el negocio original de la compañía vinculado a la extracción de grava, principalmente, un emplazamiento que comprende más de 400 hectáreas.
El Grupo MLN, fundado en 1967 por el empresario Mariano López Navarro, cuenta actualmente con una plantilla que ronda los 500 trabajadores y una facturación de 140 millones de euros. Aragón, Madrid y La Rioja son los territorios que concentran la mayor parte de su negocio.