Pilar Almalé: «‘Golondrinas’ está lleno de fuerza e intimidad»
La violagambista aragonesa publica su primer disco en solitario ▶
Poco antes de dar a luz, la violagambista Pilar Almalé recibía siempre la visita de una golondrina que volvía a su ventana día tras día. Poco después también falleció su abuelo y entonces vio claro que el título del disco debía ser Golondrinas, en plural. Y, para ello, se puso a componer el single del disco que llevará ese nombre: «La hice en solo dos días y es el vuelo de dos golondrinas, son dos melodías que danzan en el cielo y, al final, se separan. Fue algo muy bello». Ahora, ocho meses después de haber grabado el disco, por fin ve la luz este Golondrinas. Será el 7 de marzo, justo el día en el que la zaragozana ofrezca un concierto en el Teatro de las Esquinas.
«Es un homenaje a personas y lugares que han sido importantes para mí», cuenta en su estudio Pilar Almalé, que relata que los once temas que incluyen el álbum «son piezas que simbolizan etapas y experiencias. Es un trabajo muy personal». De hecho, tanto que la propia artista confiesa que podrían haber sido «tres discos porque tiene tres partes muy diferenciadas y normalmente no se meterían en u solo disco, pero yo quería que fuera así porque para mí era importante. Es un trabajo que resume de una manera hermosa mi trayectoria en estos diez años».
Para Almalé, este trabajo «está lleno de fuerza e intimidad», por la idea artística que contiene, donde la nueva música antigua y la música de ahora dialogan y por los recuerdos y dedicatorias que va desgranado a lo largo del disco. «He querido crear una obra de arte que funcione pieza a pieza y también en su conjunto. Hacerlo sola ha sido un proceso difícil pero que, al mismo tiempo, me ha dado libertad y seguridad en mi trabajo», asegura la compositora.
La artista presenta su disco en directo el próximo 7 de marzo en el Teatro de las Esquinas de Zaragoza
/ LIBERTAD EN EL INSTRUMENTO Golondrinas no es el primer trabajo de la artista, pero sí el primero que publica en solitario en lo que es un paso más en su carrera musical: «Trabajar sola es muy bello y te abre mucho el paradigma. Te da mucha libertad con el instrumento y para profundizar en él porque no tienes que adaptar el sonido al de los demás y eso te hace que abarques mucho más rango para hacer algo muy poético y profundo».
El disco incluye once temas entre canciones y composiciones instrumentales que abarcan desde piezas medievales, sefardíes, y renacentistas hasta temas del siglo XX adaptados a la viola da gamba. El disco contiene además un bonus track, una versión de Gracias a la vida, de Violeta Parra.
El disco está grabado en el estudio Sputnik Recording de Sevilla y cuenta con la producción de Rami Alqhai, violagambista, productor y director artístico sevillano reconocido internacionalmente. «Fue muy importante para mí que Rami Alqhai quisiera producir mi disco. Lo admiro como músico y trabajar con él ha sido maravilloso; ha respetado mi trabajo, pero me ha orientado para conseguir el resultado que yo buscaba. Su trabajo durante la grabación y como productor montando los temas ha sido excelente y estoy muy orgullosa de esta colaboración», aclara la artista.
El disco cuenta también con la colaboración del guitarrista flamenco Paco Jarana, del cantaor Antonio El Turry, del pianista Humberto Ríos y del percusionista Agustín Diassera, con algunos de los cuales Almalé ha trabajado en la compañía de Eva Yerbabuena.
Junto al disco, Pilar Almalé ha grabado dos videoclips para los temas Entre negros y azules y Nani, nani. Ambos ya están disponibles en el canal de Youtube de la artista y en todas las plataformas digitales.
Aunque todavía es pronto para calibrarlo, Pilar Almalé quiere ser ambiciosa con este nuevo trabajo y tiene un deseo claro, «ojalá hagamos tours por todo el mundo». De momento, tiene en la agenda el concierto de presentación el próximo 7 de marzo en el Teatro de las Esquinas de Zaragoza («tocar en casa es mucho más difícil porque ver gente conocida en el público te pone más nerviosa»). Y ya tiene cerrados dos conciertos más en Eslovenia y en Italia ya han mostrado interés: «Hay muchos lugares a los que ir», dice con alegría Pilar Almalé.