Velázquez, ante todo mucha calma
«No tengo ninguna sensación al respecto», dice sobre si vive ante el Amorebieta un partido ya límite
En Velázquez habita un entrenador de carácter, pasional, pero sus comparecencias las rellena de alusiones a la tranquilidad y de muestras de orgullo y felicidad por sus futbolistas. Su Zaragoza suma un punto de nueve, 15 de los 36 en juego con él y en La Cerámica ya se escuchó el enfado de la grada con el vallisoletano, que afronta ante el colista Amorebieta un duelo delicado. «No tengo ninguna sensación al respecto (de partido límite), llevo mucho tiempo en esto, afronto con normalidad todas las semanas, venga de victoria, derrota o empate, que es de lo que venimos en esta, de empatar y no de perder. Hay una relación formidable con el club, y ha habido mucha normalidad estos días», dijo el míster, que aplica el lema de la banda Siniestro Total, en su disco Ante todo mucha calma, y además también lo hace coincidiendo en un mensaje de confianza y paciencia que da la entidad.
Lógicamente, una derrota mañana ante el Amorebieta puede provocar un clima de tensión que dé un giro a los acontecimientos, pero al menos en teoría no parece jugarse el puesto Velázquez, que no cree tampoco que afronte el encuentro más complicado desde que llegó. «Es el que es, ni el más difícil ni el más sencillo, ni me genera más o menos desgaste, tampoco pienso en un punto de inflexión, solo en ganar y sumar tres puntos. Queremos hacer las cosas lo mejor posible y no tengo ninguna duda de que llegamos en buenas condiciones», aseguró el entrenador, que tampoco espera un Zaragoza más atrevido que otros días, una demanda que llega de muchos sectores de la afición: «Se va a ver el planteamiento más adecuado para vencer, pero no porque haya un factor externo, queremos hacer las cosas con sentido común, con coherencia, ocupándonos solo de lo controlable. Sería una irresponsabilidad preparar el encuentro movidos por algo exterior, insisto en la normalidad».
Su Zaragoza que lleva tres victorias en doce partidos mantiene la lejanía de los triunfos que ya tenía en la última etapa con Fran Escribá, pero Velázquez está «orgulloso y feliz de mis jugadores. Siempre se puede conseguir más y se puede dar más, yo el primero, porque margen de crecimiento existe en todo momento», espetó el técnico zaragocista, que apenas habló del rival, que «hace cosas bien y no es igual de local que de visitante. Al Amorebieta se le gana desde la humildad y el respeto, pero llegamos en buena disposición y creo que vamos a hacer un gran partido», sentenció.
Tras la reacción de los aficionados zaragocistas en Villarreal, el entrenador, al que no le gustaron nada los cánticos de «Velázquez, vete ya», por mucho que no lo admitiera en público, aseguró que «la afición es extraordinaria y maravillosa, la sigo elogiando, porque no la descubro yo, es de mucho nivel. No me desgasto en pensar qué ambiente habrá y tengo claro que la exigencia debe ir de dentro hacia fuera, que nosotros tenemos que ofrecer y dar, conectar a la gente».
Julio Velázquez ENTRENADOR DEL ZARAGOZA «Es el encuentro que es, ni el más difícil ni el más sencillo, ni lo veo de punto de inflexión»
«La afición es extraordinaria, no me desgasto en pensar qué ambiente habrá»
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BORGE, BAKIS Y CRISTIAN El apartado de las muchas lesiones fue amplio, empezando por la grave de Borge, que deberá pasar por el quirófano tras romperse la plastia del ligamento cruzado y que dice adiós a la temporada. «Es una pena, ya que es una lesión de larga duración. Tuvo un problema hace unas semanas, muchas veces parece solventado, pero algo hay y por desgracia aconteció lo peor y, además, ya sufrió en el pasado esa lesión. Es un chico maravilloso, me duele en el alma», espetó Velázquez, que respecto a Bakis y su lesión en el aductor que le hizo ser baja ante el Villarreal B espera un regreso temprano, «ya que está evolucionando bien y veremos si a mediados de la próxima semana puede volver al grupo», sentenció, aunque tiene difícil estar en Pucela el sábado 9. Con Cristian, lesionado en el sóleo, el regreso apunta hacia finales de marzo.