La Cincomarzada se llena De fiesta y lucha vecinal
Unas 100.000 personas, según la FABZ, se acercan al parque Tío Jorge para disfrutar del
Arebosar. Así lució ayer el parque Tío Jorge de Zaragoza, donde se celebró la 46 edición de la Cincomarzada. Un año más, las distintas asociaciones de vecinos de la ciudad protagonizaron la parte más reivindicativa de esta fiesta, que conmemora la victoria de los zaragozanos liberales frente a los carlistas en 1838, cuando los absolutistas intentaron tomar la ciudad. Según datos proporcionados por la Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza (FABZ), a lo largo del día pasaron por el recinto festivo unas 100.000 personas.
La jornada comenzó poco antes de las 11.00 de la mañana, cuando las comparsas de cabezudos de los diferentes distritos llegaron a la plaza del Pilar acompañados por las asociaciones vecinales. Desde este punto partió la conocida como Marcha de los barrios, una manifestación en la que se hacen públicas las demandas y peticiones de los vecinos de Zaragoza. En su recorrido hasta el parque Tío Jorge, en El Rabal, estuvieron acompañados por una banda de dulzaineros y gaiteros. Y es que la reivindicación y la fiesta están estrechamente unidos en esta jornada. Y para ello la música es indispensable.
Por unos barrios igualitarios, sostenibles, solidarios y participativos. Ese ha sido el lema de la Cincomarzada de este 2024. «Este año la reivindicación es más de fondo. Pedimos lo que pedimos porque estamos detectando que determinadas políticas que está llevando a cabo el ayuntamiento (gobernado por el PP), apoyado en sus socios (Vox), están teniendo una deriva que no va en esa dirección», declaró el presidente de la Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza (FABZ), Manuel Arnal, la entidad que se encarga de la organización de la jornada.
A las 12.00 horas, en el escenario principal del parque Tío Jorge, Arnal procedió a la lectura del manifiesto de este año en presencia del concejal de Participación Ciudadana del Gobierno municipal del PP, Alfonso Mendoza. «Nos preocupa la mercantilización del espacio público, la sensación de que las contratas siempre ganan aunque presten un descontrolado servicio público, que el costoso proyecto estrella de La Romareda absorba las inversiones futuras largamente demandadas por los barrios y condicione a la ciudad por décadas una empresa privada. Desgraciadamente los anuncios rimbombantes de eventos eclipsan la realidad de una ciudad laboriosa, económicamente muy activa, culturalmente dinámica y con el trabajo callado y constante de sus vecinos y vecinas, con un tejido socio-económico innovador y de futuro», declaró el presidente de la FABZ ante la presencia de Mendoza, que encajó los golpes con deportividad a sabiendas de que se encontraba en territorio hostil para los populares. Las banderas republicanas y comunistas en las casetas del paseo principal así lo atestiguaban.
En ese momento se hizo entrega de la lista de reivindicaciones de los diferentes barrios de la ciudad a Mendoza, que hizo de representante del ayuntamiento ante la ausencia de la alcaldesa, Natalia Chueca. «Algunas son crianza y otras gran reserva», bromeó Arnal, porque «hay demandas en esa lista que tienen ya mucho tiempo y que hemos entregado ya a varios concejales».
Antes de la lectura del manifiesto, una representante de la comisión de la Mujer de la FABZ animó a las miles de personas que ya llenaban el parque a esas horas a participar en la manifestación del próximo 8M. «Queremos un urbanismo con una perspectiva feminista que genere nuevos espacios públicos en los que nos sintamos seguros», declaró.
Tras la lectura del manifiesto y la entrega de las reivindicaciones, la Cincomarzada inició su parte más festiva, con un tributo a Más
«Nos preocupa la mercantilización del espacio público», lamentaba Arnal en la lectura del manifiesto
Birras en el escenario principal. El grupo de Mauricio Aznar tocó en esta misma fiesta en los años 80.
Este año participaron en la Cincomarzada más de 50 entidades y casi una treintena de peñas. Dispuestos en el pasillo central del parque, los distintos colectivos ofrecían desde productos de todo tipo con sus logos hasta comida y cerveza. Allí estaban la Asociación de Familias de Infancias y Juventud Trans Chrysallis, el Ateneo Republicano de Zaragoza, la Casa de Palestina en Aragón, la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), Nogara Escuela d’Aragonés, Ecologistas en Acción y miembros del movimiento Salvemos Canal Roya. También había partidos políticos como CHA, IU, el Partido Comunista de España y ZeC.
Los que no estuvieron fueron los feriantes, que hace pocos días anunciaron que no montarían sus puestos ante la subida de las tasas que deben abonar por parte del ayuntamiento. Esa fue la única nota negativa de la jornada.
Las asociaciones culturales de otros países también se dejaron notar en el parque, con sus tradicionales sabores para quien quisiera disfrutarlos. «Tenemos llajwa, pero la de aquí pica menos que la de Cochabamba», comentaban nostálgicos desde la Asociación Boliviana de Zaragoza.
Entre los que fueron a disfrutar de la Cincomarzada, había gente de todas las edades. Víctor, Jaime, Gorka y Marcos aprovecharon el día festivo para acercarse al parque, alguno de ellos por primera vez, aunque preparados para la ocasión. «Reconozco que he mirado esta mañana qué se celebraba concretamente, y ya me he empapado que es por la victoria contra los carlistas», decía uno de ellos, generando las risas de sus amigos, que le comentaban que se notaba «que ha estado empollando». Eso sí, el ambiente festivo les estaba pareciendo «espectacular». «Hay gente de todas las edades, familias... La verdad que está muy bien», señalaba otro de los amigos.
Y cómo no, en cualquier fiesta que se precie, y más cuando las peñas están de por medio, la comida fue otro de los ingredientes de la jornada. En torno a un caldero conversaban miembros de la peña Los Topos, de Las Fuentes, que preparan unas patatas a la riojana entre reivindicaciones. «Que nos arreglen las calles de Las Fuentes y Miraflores, que están muy viejas», decía José Luis, mientras su compañero le espetaba: «¿Pero has echado sal o no?».
Una vez terminó la fiesta, los servicios municipales entraron al parque para dejarlo limpio. La jornada transcurrió sin incidentes y la Cincomarzada volvió a ser un éxito de participación.