El Festival de Huesca roza su récord con 2.049 cortos
Las producciones han llegado de un total de 91 países
La LII edición del Festival Internacional de Cine de Huesca ha recibido un total de 2.049 cortometrajes procedentes de 91 países de los cinco continentes, la tercera cifra más alta de su historia. España, Francia y Alemania son los territorios desde los que han llegado un mayor número de obras, todos ellos superando el centenar de trabajos; justo por detrás aparecen México, Brasil, Argentina y Colombia con más de 50 producciones cada uno, según informó ayer el festival en una nota de prensa.
Las más de 536 horas de metraje recibidas están siendo ya visionadas por un comité profesional que conformará los tres concursos en los que se ponen en juego los Premios Danzante. Este galardón es uno de los seis en España que sirve de preselección para los Premios Oscar y cuenta como aval en los Premios Goya.
«Las cifras refrendan el peso y proyección internacional del festival. Gracias al gran trabajo del equipo a lo largo de los años se consolida una tendencia ascendente que catapulta a Huesca como referente cultural de la industria cinematográfica en los cinco continentes», destacó la directora del certamen, Estela Rasal.
El total de obras se distribuyen entre las tres secciones competitivas en las que se divide el certamen: 908 trabajos han llegado para el concurso iberoamericano, 785 para internacional y 350 para documental.
En lo que respecta a la división por países: España destaca en primer lugar con 755 producciones, justo por detrás se sitúa Francia con 215 –el territorio galo ha sido designado además país de honor de esta edición– y completando el podio está Alemania, que supera también el centenar (103).
El continente americano destaca igualmente por su respuesta a la convocatoria; México (73), Brasil (70), Argentina (60), Colombia (53) y Chile (43) son los siguientes en una clasificación donde aparecen otras cinematografías como Corea del Sur, EEUU, China, Turquía, India o Marruecos.
/ EXPANSIÓN GEOGRÁFICA La expansión geográfica queda patente con el envío de películas desde países tan remotos como Islas Cocos, Timor Oriental, Guadalupe, Uzbekistán o Uganda.
Las nuevas voces del sector audiovisual siguen siendo una seña de identidad del festival, con más de un cuarto del total de óperas prima (586) y 319 cortometrajes provenientes de escuelas.
El certamen altoaragonés está considerado como uno de los mayores escaparates existentes para el género, habiendo lanzado las carreras de multipremiados cineastas como el mexicano Michel Franco, la española Claudia Costafreda o el desaparecido Fabián Bielinsky, quien en 2006 dejo al cine argentino sin uno de sus grandes puntales.