El último viaje
La muerte como último misterio o desconocida frontera sigue estando ahí, al término de cada vida, como sordo epílogo a tantas preguntas sin respuestas. Nadie, que sepamos más allá de toda duda razonable, ha regresado para contarnos qué –o quienes–, hay al otro lado, cómo es allá el espacio, el tiempo, si hay conciencia espiritual o permanencia pasiva, si hay vida o tan solo muerte.
Enric Benito se ha especializado a lo largo de toda su carrera médica por combatir y paliar los efectos del óbito en los seres vivos, tanto en el concepto preparatorio para abordarlo como en los recursos para sobrellevarlo, incluida la agonía.
Para ello, entre otras muchas iniciativas, ha escrito un muy recomendable libro, El niño que se enfadó con la muerte. Claves para entender y acompañar en el viaje definitivo (HarperCollins), que esta tarde se presenta en Fundación Ibercaja de la mano del catedrático de Psiquiatría de la Universidad de Zaragoza (se da la circunstancia de que también Enric Benito estudió en la capital aragonesa) Javier García Campayo.
En sus páginas, Enric Benito se remonta a sus experiencias infantiles para invitarnos a recordar, poniendo en acción la memoria, escenas, tantas de ellas desgarradoras, en las que nuestra sensibilidad de niños pudo quedar fuertemente impresionada por la irrupción de la muerte en nuestros hogares.
Siendo muy pequeño, el niño Enric «se enfadó» con aquella invisible señora que tanto dolor causaba, tantos llantos, tantas lágrimas. Más adelante, siguiendo este impulso o vocación, se decidiría a combatirla desde sus primeras prácticas como oncólogo en hospitales de Barcelona y Palma de Mallorca, de donde es natural. Finalmente, abandonaría la oncología para «acompañar» a cada enfermo en su último viaje, esforzándose por combinar los principios de humanidad (solidaridad, piedad...) con los tratamientos farmacológicos o químicos aplicados por la ciencia médica a aquellas enfermedades irreversibles, de lento pero imparable avance, que acaban minando la resistencia física y mental de los enfermos.
Un libro para leer con atención, para emocionarse y comentar, pero también para reflexionar sobre sus propuestas en torno a las fórmulas de los cuidados paliativos y a la naturaleza humana enfrentada a su irremediable fin.
Un libro para leer con atención, para emocionarse y comentar, pero también para reflexionar sobre sus propuestas