Crece el número de accidentes por conductores kamikazes en España
En lo que va de año ➲ tres personas han muerto por colisiones en dirección contraria
El número de conductores kamikazes crece en España. En lo que llevamos de año, ya se han registrado tres fallecimientos provocados por un conductor kamikaze. Los tres murieron en el mismo accidente, el que tuvo lugar el pasado 27 de enero en el kilómetro 19 de la A-3, a la altura del municipio de Rivas Vaciamadrid. Un hombre de 37 años, que viajaba en dirección contraria, impactó contra un vehículo en el que viajaban cuatro chicos. Dos de ellos (de 23 y 26 años) fallecieron en el acto. Los otros dos resultaron heridos de gravedad.
No es, sin embargo, el único caso de conductores kamikaze que se ha registrado en lo que llevamos de 2024. En el transcurso del mes de febrero se detectaron casos de conductores circulando en dirección contraria en los municipios asturianos de Llanera y El Franco, en Peñaranda (Salamanca), Vivares (Badajoz), Orihuela (Alicante), Lorca (Murcia), Manacor (Mallorca) o Granada.
Se trata de un delito conocido como 381, porque es el nombre del artículo del Código Penal al que hace referencia. El delito de conducción temeraria con el manifiesto desprecio por la vida de los otros. Al delito de conducción temeraria recogido en el 380, el Código Penal le agrega en el 381 el manifiesto desprecio por la vida de otros. Este delito no sólo consiste en conducir de manera temeraria,
sino que se le agrega la máxima gravedad.
Y ya es un hecho: se va incrementando el número de kamikazes en nuestras carreteras. Lo hizo en 2022 respecto a 2021 y, presumiblemente, lo hará en 2023 respecto a su predecesor. Porque aún no se disponen de las cifras oficiales de 2023 que proporciona la Memoria Fiscal (desde la Fiscalía explican a este diario que deberían ser pública a mediados de año). Pero el año anterior aumentó el número de denuncias del Ministerio Fiscal contra este tipo de delitos en las carreteras españolas.
Ese incremento ha sido confirmado desde la Fiscalía de Seguridad Vial, cuyas fuentes explicaron a El Periódico de España, del mismo grupo editorial, que «en el año 2022, las acusaciones por el delito del art. 381 CP han aumentado un 18%, ya que han pasado de 182 frente a las 154 que se registraron en 2021», explica el Fiscal. Lo que
ha disminuido un 17% es el número de sentencias por este motivo en 2022, que han pasado de 154 a 114. Pero esto «no obedece a la evolución del año. Algunas sentencias se resuelven antes y otras más tarde», cuentan fuentes fiscales.
Hay un problema en España respecto a este tipo de delito. Y es que la estadística no discrimina los daños ocasionados por el kamikaze: «Solo disponemos en las estadísticas judiciales de los datos relativos a los delitos de peligro, es una deficiencia del sistema estadístico que utilizamos que no se puedan recoger los datos relativos a los delitos de resultado», explica la Fiscalía.
No obstante, desde la DGT aseguran que «entre 2014 y 2018 se registró en España una media de 17 accidentes frontales, que conllevó una media de 10 muertos y 12 heridos graves al año». Un problema que no es específico de nuestro país y que afecta a todo el continente: en Europa se dan unos 4.500 accidentes de este tipo cada año.
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TRES PERFILES Las carencias del sistema hacen que no se pueda discriminar el número de fallecidos ni cuántos de los conductores imprudentes son kamikazes y cuántos están incurriendo en otro tipo de ilegalidades. Pero hemos consultado con fuentes policiales, que han trazado varios perfiles dentro del parámetro de conductores kamikazes. Concretamente, hablan de tres tipologías distintas.
«La primera es el enajenado mental que tiene perturbadas las facultades volitivas de forma transitoria. Es decir, el que va borracho o drogado y no controla lo que hace.». Es el perfil más habitual en este tipo de delitos. El segundo perfil corresponde a ancianos que se despistan. Finalmente, el menos habitual, engloba a personas con brotes psicóticos.