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El técnico llegó en noviembre con el equipo penúltimo y con tan solo siete puntos = Ahora el Teruel ha encadenado tres victorias y se sitúa a dos puntos de la permanencia
En las últimas tres semanas, el CD Teruel ha dado un paso de gigante en su lucha por conseguir el sueño de la salvación. Con tres victorias consecutivas ante el Nàstic de Tarragona, Rayo Majadahonda y Logroñés, está tan solo a dos puntos de salir del descenso. Esta situación era difícil de imaginar cuando Raúl Jardiel llegó al club turolense. En ese momento todavía no se había conseguido una victoria en las trece jornadas que se habían disputado y el equipo era penúltimo, empatado con el colista, el Sabadell, a siete puntos. Catorce partidos después las sensaciones que desprende el equipo son otras, y este sábado reciben al Barça B para tratar de seguir con esta buena dinámica.
Raúl Jardiel fue el sustituto de Víctor Bravo en la jornada trece del campeonato, con el equipo hundido en la clasificación, pero no anímicamente, ya que confirma que nunca dejó de trabajar para acercarse al objetivo: «Yo cuando llegué al equipo, dentro de que no ganar en trece jornadas te supone una losa, vi a los jugadores muy bien, centrados y alegres, con ganas de revertir la situación. Si manteníamos esa fortaleza mental era una cuestión táctica, y eso lo íbamos a mejorar con el entrenamiento y con el trabajo. Y así ha sido, la verdad es que han refrendado aquel mensaje e ideas que lanzamos a mi llegada».
Ahora la situación del Teruel es otra, y Jardiel lo nota en el vestuario: «Está muy bien a nivel anímico. Desde que estoy he visto al equipo muy bien, más allá de que en momentos puntuales haya costado más sumar, pero he visto a la gente con las ideas claras y sabiendo cómo es la competición». Con él llegó la primera victoria del equipo a finales del mes de enero ante el Cornellà, una inyección de moral que levantó al grupo: «Ahora que estamos encadenando victorias con todo lo que ha costado, especialmente a nosotros que ganamos el primer partido en la jornada 20, lógicamente estamos mucho más convencidos y la victoria mejora todo lo anímico. Mejora el convencimiento, la confianza, el ánimo, creo que las victorias son el mejor generador de confianza y de motivación que hay. Y en este caso las estamos consiguiendo y el equipo está muy bien», relata.
El técnico resume en una palabra la clave de este cambio de tendencia, insistencia: «Lo más importante ha sido la insistencia, porque excepto ante el Lugo, llevábamos sin perder todo el 2024 habiendo ganado al Cornellà, empatado fuera con el Arenteiro, que es un campo muy difícil y sacando el empate también ante el Celta de Vigo B, que es un equipo de playoff. Para mí veníamos creciendo, veníamos dando pasos cortitos». También la mejora diaria en la táctica del equipo ha sido un factor diferencial: «El equipo seguía puliendo y mejorando cosas a nivel ofensivo porque ha sido un equipo sólido, y eso lo hemos mantenido. Pero en ataque hemos seguido mejorando los registros, las sensaciones y los argumentos», dice el preparador.
Un momento clave
Todo esto llevó al Teruel a ganar por 0-2 al Gimnàstic de Tarragona, segunda clasificado, en el Nou Estadi: «El día del Lugo perdimos, nos subimos al bus de Tarragona a 10 puntos de la salvación y el equipo insistió, se olvidó de la situación y se quiso reivindicar. Creyó en lo que hacía, tuvo confianza, y de ahí han llegado estas tres victorias seguidas», afirma Jardiel.
A pesar de haber vivido unos meses muy difíciles, la afición turolense no ha dejado de apoyar a su equipo partido a partido, algo que Raúl valora mucho: «La importancia de la afición es máxima porque somos un equipo que hemos estado lejos en la clasificación, y en todo momento hemos sentido que está con el equipo, y ha valorado el esfuerzo y el compromiso del equipo en cada partido, más allá de si los resultados acompañan o no. Lógicamente en estas situaciones difíciles se necesita estar muy juntos, tanto con la afición, directiva y compañeros. Hacen falta muchas pequeñas patas que sostengan al equipo, y la afición es sin duda una de las más importantes».
Esta buena racha hace que la salvación se perciba como algo mucho más factible, aunque el entrenador es realista y sabe que el equipo tendrá que luchar hasta el final: «Nosotros vamos a tener que convivir con esta zona durante todo el año. Llevamos todo el año así y estamos preparados para ello, lo encaramos más cerca que nunca y llegamos mejor que nunca. Ese puede ser un aspecto diferencial, que nosotros vamos a saber convivir con la igualdad en la recta final de la temporada, y esta situación que ahora mismo tenemos».
Además, Raúl Jardiel sabe lo que es entrenar en Segunda RFEF, con el CD Ebro, y ahora en Primera con el Teruel, y puede percibir grandes diferencias entre ambas categorías: «Hay un salto muy importante entre Primera y Segunda RFEF. Tuve la suerte de estar doce partidos en el primer equipo del Real Zaragoza con César Láinez, y me parece que hay un mayor salto entre Segunda y Primera RFEF que entre Primera RFEF y Segunda División».