La DGA inyectará 52,5 millones para la rehabilitación de 900 viviendas rurales
El objetivo es reformar los cascos históricos de los 700 municipios de menos de 3.000 habitantes, que podrán recibir un máximo de 500.000 euros cada uno con un máximo de 10 viviendas por localidad
El Gobierno de Aragón sigue desgranando los entresijos de su programa de vivienda, el primer gran proyecto de la legislatura comandado por PP y Vox para paliar el problema del acceso al mercado inmobiliario con una inversión de 300 millones en el próximo sexenio. El Ejecutivo autonómico inyectará una sexta parte del montante total, 52,5 millones de euros, a la rehabilitación de más de 850 viviendas públicas en el medio rural ubicadas en municipios de menos de 3.000 habitantes.
Se trata de un programa que se desarrollará entre 2024 y 2030 y que recibirá en el presente curso una dotación de seis millones de euros que se incrementará año a año. El consejero de Fomento, Vivienda, Movilidad y Logística, Octavio López, y el vicepresidente primero y consejero de Desarrollo Territorial, Despoblación y Justicia, Alejandro Nolasco, presentaron ayer el Plan 700 en la localidad zaragozana de Belchite.
«¿En qué pueblo de Aragón no hay una calle Mayor con tres, cuatro o cinco casas vacías o derruidas? A curar esa cicatriz va este Plan 700», resumió López al explicar el objetivo de este programa en Belchite junto al vicepresidente y responsable de Despoblación, Alejandro Nolasco (Vox), que por su parte aseguró que va a ser «el buque insignia para que la gente se quede en el territorio».
«El programa está directamente pensado para los 700 municipios aragoneses cuyas necesidades de vivienda son bien distintas de las tres capitales. Vamos a conceder ayudas a los ayuntamientos para rehabilitar viviendas de titularidad municipal y reformar aquellos inmuebles que no son de uso residencial pero puedan albergar vivienda pública con los necesarios justos de ordenación urbanístico», explicó el consejero popular, que recordó que la DGA podría ayudar a la construcción de vivienda en suelos residenciales de titularidad municipal «que permitan la regeneración de
los cascos históricos. El presupuesto total de 52,5 millones se repartirá a partes iguales entre los departamentos de Vertebración del Territorio, manejado por Vox, y Vivienda, dirigido por el PP. El montante se distribuirá entre los 700 pueblos aragoneses que tienen menos de 3.000 habitantes, con la posibilidad de recibir un máximo de 500.000 euros por localidad para no más de diez viviendas con unas ayudas que serán
de hasta 60.000 euros por residencia rehabilitada o construida en municipios de menos de 500 habitantes. La cifra irá decreciendo conforme sean localidades con más vecinos, con una media de 55.000 euros de ayudas para los de 500 a 1.000 habitantes y de 50.000 euros para los municipios de hasta 3.000 vecinos.
Para conceder las ayudas del Plan 700 se tendrá en cuenta el índice sintético de desarrollo territorial, que sirve para conocer el nivel de desarrollo de los municipios y comarcas, y evaluar la cohesión territorial de Aragón. Este índice comprende indicadores como la renta per cápita, los equipamientos, las líneas ferroviarias y el patrimonio territorial, por lo que el vicepresidente Alejandro Nolasco aprovechó para quejarse de la posible supresión de 151 paradas rurales de autobuses de transporte interurbano de las líneas estatales, que, según aseguró, «perjudicará a 134.000 aragoneses».
Nolasco subrayó que entre las dos consejerías le han dado «un giro de 180 grados» a las «catastróficas» políticas de vivienda durante los últimos ocho años, recordando que solo se llegaron a construir 86 viviendas públicas, un tercio de las cuales se quedaron pendientes.
Por su parte, el alcalde de Belchite y presidente de la Federación Aragonesa de Municipios Comarcas y Provincias (Famcp), Carmelo Pérez (PP), agradeció que la DGA «se haya acordado de los municipios pequeños», al considerar que es «muy necesario» apostar por la vivienda en el medio rural.
La sociedad pública Suelo y Vivienda de Aragón será protagonista como gestora de proyectos
En el programa jugará un papel protagonista la sociedad pública Suelo y Vivienda de Aragón (SVA), pues hará las veces de oficina centralizadora que se encargará de recibir las solicitudes y de gestor intermediario al realizar los proyectos. Además, cuando los ayuntamientos no puedan asumir la carga burocrática, SVA podrá encargarse de realizar las obras previa firma de convenio con los consistorios interesados.
Precisamente, esta sociedad podrá ayudar a la construcción de vivienda en suelos residenciales de titularidad municipal que permitan la regeneración y recuperación de los cascos históricos y la consolidación de los vacíos urbanos de los municipios, como avanzó el
«¿En qué pueblo no hay una calle Mayor con 3, 4 o 5 casas vacías? A curar esa cicatriz va este plan »
OCTAVIO LÓPEZ CONSEJERO DE FOMENTO Y VIVIENDA
«Este programa es el buque insignia para que la gente se quede en el territorio»
ALEJANDRO NOLASCO VICEPRESIDENTE PRIMERO Y CONSEJERO DE DESPOBLACIÓN
consejero, con el objetivo final de este plan de impulsar la vivienda pública en el medio rural aragonés y dotar a los jóvenes que apuestan por seguir habitando en sus pueblos de oportunidades asequibles para acceder a una vivienda digna.
El programa presentado es una de las ramas del ambicioso Plan Aragón Más Vivienda, presentado por el Gobierno de Aragón PP-Vox el pasado 12 de marzo como el primer gran proyecto de la legislatura para paliar lo que consideran «una emergencia social».
La inversión alcanza los 300 millones de inversión (120 millones del Gobierno de Aragón, 73 del Gobierno central y 107 millones que llegan desde los fondos europeos) repartidos en seis estrategias y acciones propias, seis de tipo estatal, seis líneas europeas y ejecutadas también con seis instrumentos.