El rocódromo del futuro llega a España, se llama ‘Indoorwall Express’
El nuevo negocio digital de instalaciones de escalada ofrece una inversión inicial asequible y rentable
La práctica de la escalada está experimentando un crecimiento exponencial, y con ella la demanda de instalaciones que ofrezcan experiencias únicas y emocionantes. En este panorama en constante evolución, la empresa Indoorwall ha ideado un tipo de instalación que automatiza la mayoría de operaciones gracias a su tecnología, reduciendo así los costes operativos y ofreciendo una mayor rentabilidad.
El nuevo modelo de franquicia digital “Indoorwall Express” es más compacto pero con todas las comodidades y completamente equipado, incluyendo diferentes zonas: escalada, ocio y confort, fitness, vending y coworking. Las salas cuentan con un moderno sistema que permite el monitoreo en tiempo real de todas las actividades y lo que sucede en la instalación de escalada. Además, gracias a la app de Indoorwall es posible llevar la gestiones del rocódromo de manera automatizada y llevar al día asuntos como los pagos de las cuotas de socios, el stock de presas o la organización de las clases, entre otros temas.
Este tipo de rocódromo requiere de menos personal, posee una atención centralizada y sus espacios están diseñados principalmente para hacer disfrutar a los clientes y acercar experiencias de escalada a un público más amplio y diverso. Un enfoque innovador que no solo optimiza la eficiencia del propio centro, sino que también permite a los inversores aprovechar al máximo su capital, con la ventaja adicional de una inversión inicial reducida.
La mejor parte es que durante todo el proceso de emprendimiento los franquiciados pueden contar con el respaldo integral de Indoorwall, líder en el mercado de instalaciones de escalada con 12 centros y 3 proyectos en marcha. La empresa de larga trayectoria, apoya a los emprendedores desde el primer momento en todas las fases: búsqueda de la ubicación ideal, diseño del rocódromo, gestión operativa, marketing, selección y formación del personal, en caso de ser necesario. Un asesoramiento personalizado de principio a fin.
La inversión inteligente, ahora
Nos encontramos en un momento en el que el interés por la escalada no hace más que aumentar y atraer a todo tipo de personas de cualquier edad y nivel de aptitud. El número de escaladores continúa en ascenso y es actualmente imparable, sobre todo desde la inclusión de este deporte en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, donde el español Alberto Ginés se proclamó medalla de oro en escalada. Además, existe una mayor concienciación sobre la salud y, en ese sentido, la escalada aporta numerosos beneficios tanto física como mentalmente.
Según un recuento elaborado por CMDsport en España, a día de hoy hay más de 350 rocódromos entre públicos y privados. Sin embargo, la oferta de instalaciones que realmente marquen la diferencia y se adapten a las necesidades del mercado es limitada. Es aquí donde Indoorwall entra en juego, presentando un modelo de negocio único que fusiona innovación tecnológica, eficiencia operativa y una experiencia completa y satisfactoria tanto para los escaladores como para los inversores. Y este concepto además tiene en cuenta los principales costes asociados a la gestión de un rocódromo, como los gastos de personal, mantenimiento o marketing.
Este entorno favorable y con un crecimiento sostenido del sector, representa una oportunidad única para aquellos que buscan entrar en este mercado y competir con éxito. Con opciones como “Indoorwall Express” el negocio de rocódromos se vuelve más accesible para los emprendedores, y en muchos casos hace de una pasión una profesión. Porque ya no se hace necesario hacer inversiones millonarias, ni limitarse a ubicaciones en polígonos industriales. Ahora, los centros ubicados en áreas urbanas y núcleos poblacionales pueden generar un gran impacto en la facturación de estos establecimientos.
Indoorwall Express es un valor seguro, respaldado por la experiencia líder en el mercado
Con una inversión inicial reducida se puede convertir una afición en profesión