La izquierda exige «medidas concretas y reformas» en la continuidad de Moncloa
CHA se muestra satisfecha con «la respuesta social» a los cinco días de pausa, pero el PAR tacha de «irresponsable» a Sánchez y Teruel Existe admite que esperaba una moción de confianza
La continuidad de Sánchez al frente del Gobierno central dejó, como era de esperar, multitud de reacciones en la política aragonesa, tan en ascuas en las últimas horas como el resto de la sociedad española. Tras cinco días de impás, el presidente optó por un mensaje continuista en el que aseguró que se siente «con más fuerza si cabe» para seguir al frente del Ejecutivo. Una decisión que cayó de manera distinta en los grupos políticos que conforman el arco parlamentario de La Aljafería, con unos exigiendo acciones concretas y otros lamentando el poco alcance de la decisión.
Chunta Aragonesista reincidió en lo expresado en los últimos días, donde ya dejaron clara su postura favorable a que Sánchez continuase al frente del Ejecutivo nacional. Su presidente, Joaquín Palacín, volvió a opinar que la estrategia de convertir la política «en un lodazal» es «lamentable». «Su único fin es tratar de conseguir los objetivos políticos que no son capaces de lograr en las urnas», continuó Palacín, que puso en valor «la respuesta social desde la izquierda» en los últimos días y celebró que la continuidad de Sánchez «va a permitir proseguir en esta legislatura con las agendas social, laboral y territorial y, ahora con más fuerza, recuperar también la agenda de regeneración democrática y recuperación de derechos y libertades», expresando también la necesidad de renovar el poder judicial y derogar la ley mordaza.
Con algo más de sorpresa y con alguna duda se expresaron desde Teruel Existe, donde esperaban que la comparecencia de Sánchez dejase algo más de claridad, más allá que la mera continuidad del propio presidente. El portavoz del grupo parlamentario Aragón-Teruel Existe, Tomás Guitarte, no escondió su sorpresa tras la rueda de prensa de Pedro Sánchez: «Nos ha sorprendido la decisión del presidente del Gobierno, que después de los días de reflexión, ni siquiera plantee una moción de confianza, ni políticas concretas para mejorar la situación de crispación y polarización que vivimos». «Queda demostrado que los grandes partidos solo piensan en sus intereses y no tienen un proyecto de país claro para la ciudadanía», criticó Guitarte.
Podemos Aragón fue uno de los primeros partidos en mostrar su opinión respecto a la declaración institucional de Pedro Sánchez. La formación subrayó que el presidente «dice que se queda, pero no para qué». «No asume que es el Gobierno quien debe proteger a los ciudadanos del fascismo, como han hecho otros países, y echa la responsabilidad a la calle, como si estuviera pidiendo el voto y nada más», señalaron fuentes de Podemos Aragón tras confirmarse que Sánchez iba a continuar en el cargo.
En ese sentido, los morados pidieron «medidas concretas» e indicaron que desde su partido seguirán «proponiendo y manteniendo el apoyo si realmente quiere hacer algo útil para la democracia», refiriéndose especialmente
a la «renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ)» y a impulsar y reforzar medidas legislativas como «la ley de medios, la de Memoria Democrática o la derogación de la ley mordaza».
En una línea similar se expresó el coordinador general de IU en Aragón y portavoz de Izquierda Unida en el Parlamento autonómico, Álvaro Sanz, quien aseguró que desde su formación esperan «que esto sirva, al menos, para abordar con profundidad y urgencia las reformas legislativas necesarias para acabar con la impunidad que ampara los montajes y la guerra judicial, empezando por derogar la conocida como ley mordaza y renovar ya el CGPJ».
Desde el PAR, por su parte, su portavoz en las Cortes autonómicas,
Alberto Izquierdo, lamentó «la falta de valentía del presidente del Gobierno, que ha sumido a este país en cinco días de desconcierto y absoluta locura colectiva, para luego continuar». Según el portavoz de los aragonesistas, lo acontecido en los últimos días es «una irresponsabilidad manifiesta», y aseveró que la decisión de Sánchez responde a la campaña electoral en Cataluña que puede marcar la agenda política de todo el país en las próximas semanas . «Son elecciones y Sánchez y Feijóo están centrados en sacar rédito el uno del otro», criticó Izquierdo, que esperaba también la celebración de una cuestión de confianza en la que se abordasen cuestiones de directa implicación para Aragón, como el trasvase del Ebro.