La justicia concede la semilibertad a Inaki Urdangarin
Solo irá a la cárcel a dormir y podrá pasar en casa todos los fines de semana
El Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 1 de Castilla y León estimó el recurso de Iñaki Urdangarin, preso en la cárcel de Brieva (Ávila), y le concedió el tercer grado penitenciario, de modo que trabajará fuera de prisión, regresará al centro solo para dormir y disfrutará de todos los fines de semana.
La concesión del tercer grado es ya firme, toda vez que la fiscalía desistió de recurrir el auto judicial. El auto, en línea con lo apuntado por el fiscal, recoge la «positiva evolución» del interno, lo cual lleva a que reúna los requisitos legalmente establecidos para acceder al tercer grado, si bien como complemento se considera adecuado el mantenimiento de la actividad laboral que viene desarrollando en el centro Don Orione y la realización de un programa de tratamiento específico en materia de delincuencia económica.
El titular del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria concluye que la resolución de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias que apostaba por mantener al cuñado del Rey en régimen de segundo grado «no da explicación alguna» de la razón del peor trato dado al recurrente frente a los demás condenados en el caso Nóos, cuando al menos, con relación a uno de ellos (el exsocio Diego Torres), las circunstancias del interno Urdangarin «son claramente más favorables a día de la resolución que cuando a aquél otro le fue concedido el tercer grado, vulnerándose con ello el principio de igualdad consagrado en el artículo 24 de la Constitución española».
Aval de la fiscalía
El Ministerio Fiscal se adhirió al recurso interpuesto por Urdangarin y apoyó su progresión al tercer grado con la condición, aprobada ahora por el juez, de que el penado mantuviera su actividad laboral y se sometiera a un programa de tratamiento de delincuencia económica.