Esquinazo al Congreso
Salvador Illa abandonará hoy el Ministerio de Sanidad sin comparecer en el Congreso para dar explicaciones sobre la evolución de la pandemia. Ello le valió ayer las críticas no solo de toda la oposición, sino también del socio del PSOE en el Gobierno, Uni
El anuncio de la Moncloa, ayer a primera hora, de que Salvador Illa dejará hoy su cargo como ministro de Sanidad, sacudió el debate de la Diputación Permanente, el órgano que sustituye a los plenos en los periodos inhábiles. Porque así son los meses de enero, julio y agosto en el Congreso: inhábiles, sin plenos ordinarios, porque lo marca la Constitución.
La noticia de Illa enfadó a toda la oposición al completo, incluido el socio del PSOE en el Gobierno central, Unidas Podemos. Todos coinciden en denunciar que Pedro Sánchez ha aprovechado su poder para hacerle media campaña a Illa, candidato del PSC a las elecciones catalanas. Además, el calendario elegido, al dejar la cartera hoy, le ha salvado de comparecer, como se comprometió, ante la comisión de Sanidad con una regularidad mensual. Y eso que España sufre una agresiva tercera ola de contagios por covid, rozando una incidencia acumulada de 900 casos por cada 100.000 habitantes. Illa, que no da explicaciones en sede parlamentaria desde la última semana de 2020, podría haber acudido a la Cámara baja ayer o este martes si hubiera querido, pero decidió no hacerlo. Se habría expuesto a preguntas incómodas de todo el arco parlamentario poco antes del inicio de la campaña electoral.
Gobierno «a la fuga»
«Illa se está burlando del Congreso con todo tipo de trampillas», lamentó Cuca Gamarra, portavoz del PP. Exigió al Ejecutivo que comparezca y «no se dé a la fuga» ante la tensión en las ucis y los fallos del plan de vacunación. En la Diputación Permanente se votaron numerosas peticiones de comparecencias. Muchas cayeron en saco roto (incluidas las del propio Sánchez para hablar del covid y del Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia), pero tres de las que señalaban al ministro de Sanidad, cuyo nuevo nombre se conocerá en las próximas horas, salieron adelante: la persona que sustituya a Illa deberá responder al compromiso de las explicaciones mensuales, tendrá que explicar qué se está haciendo para frenar esta nueva racha de contagios y también deberá analizar la conveniencia de que las elecciones catalanas se celebren el 14 de febrero, «en plena tercera ola».
«Es una auténtica tomadura de pelo», dijo Iván Espinosa de los Monteros, portavoz de Vox, sobre la salida ahora del Ejecutivo de Illa. Incluso Unidas Podemos, por boca del presidente del grupo parlamentario y diputado de En Comú Podem, Jaume Asens, y de la portavoz nacional de los morados, Isa Serra, cargó contra la actuación del todavía ministro. «No puede ser que el ministro salga por la puerta de atrás sin antes dar explicaciones», dijo Asens, que cree que ha hecho un «buen trabajo» como ministro. El diputado reclamó, sin éxito, al titular de Sanidad que no dimitiera hasta el jueves, después de comparecer en el Congreso.
Después de escuchar estos argumentos, José Zaragoza (PSC) tomó la palabra para defender la posición del grupo socialista en la petición sobre el posible impacto, desde un punto de vista sanitario, de la celebración de los comicios catalanes el 14-F. «Lo que les molesta es que va a ganar las elecciones», aseguró. Criticó a ERC y Junts por denunciar la falta de explicaciones de Illa cuando la ‘consellera’ de Salut, Alba Vergés, solo ha comparecido, destacó, una vez, en abril.
Con esa tesis, Zaragoza rechazó los ataques del PP. A Gamarra le recordó que el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid (PP) ha comparecido cuatro veces, la última, en junio. «Al final, el único que va a dejar su cargo antes de la campaña será Illa», continuó, en referencia a que Pere Aragonés (ERC), Laura Borràs (Junts) y el resto de cabezas de lista seguirán en sus puestos.
Los consejeros de Catalunya y Madrid han dado menos explicaciones que Illa, según el PSOE