La deuda del club asciende a 1.173 millones de euros
La fotografía económica del Barça que ha dejado la gestión de Bartomeu es terrorífica. Es un club que se enfrenta a una deuda gigantesca.
La memoria económica del Barça que ha dejado Josep Maria Bartomeu como legado antes de dimitir delata la gravedad de la crisis que deberá asumir el próximo presidente, a partir del próximo 7 de marzo, si la pandemia permite que se celebren las elecciones. Ahora, el club ya debería tener nuevo presidente porque la cita con las urnas estaba fijada para el 24 de enero, pero se debió aplazar. La deuda total es de 1.173 millones de euros, teniendo 730 de esos millones a corto plazo, un concepto particularmente asfixiante.
Esa deuda ahoga al club unida también a las amortizaciones de los fichajes, dibujando un panorama tenebroso, según recoge esa memoria anual. Antes, por ejemplo, del próximo 30 de junio, el Barça debería pagar a los bancos 266 millones, 90 de los cuales pertenecen a Goldman Sachs. Además, el fondo de maniobra es negativo en 602 millones de euros, incluyendo una frase en ese documento que retrata la verdadera dimensión de la crisis. «Esto pone en duda la aplicación del principio de empresa en funcionamiento».
Masa salarial del 74%
Es una situación que coloca al Barça lo más cerca posible de «quiebra técnica», sin que técnicamente se puedan emplear esas palabras. Ahora, además, con el brutal descenso de ingresos por la pandemia, el impacto de la masa salarial se ha disparado rompiendo todos los límites.
El coste de la plantilla es de un 74%, disparando aún más la alarma de Joan Laporta, Víctor Font y Toni Freixa, que esperan saber el día de las elecciones.
La deuda a corto plazo, de 730 millones, resulta particularmente asfixiante