Las bibliotecas ¿son esenciales?
¿Somos imprescincibles los trabajadores de Bibliotecas de Barcelona en estos días de pandemia? Pues, por alguna razón, se ve que sí. Trabajo en una biblioteca de Barcelona, y pese a la nefasta situación actual (más contagios que nunca, más muertes, más riesgo de infección), estamos abiertos al público. El famoso Procicat así lo determina. Cuando muchos espacios con atención al público están cerrando o tienen severas restricciones, nosotros hacemos el mismo horario que cuando no había pandemia.
A partir del fin de semana del 23 y 24 de enero, las tiendas no esenciales, tienen que estar cerradas; los gimnasios, también; los bares y los restaurantes con restricciones horarias; pero las bibliotecas, no, las bibliotecas como si fuéramos servicios de primera necesidad, como supermercado. Me parece increíble. ¿De verdad no ven que nos están poniendo, a todos los trabajadores, en serio peligro? ¿Qué tiene que pasar? ¿Que muera algún trabajador o alguien de nuestras familias para que nos tomen en serio?
Desde que empezó la pandemia, también he estado en el servicio de admisiones de urgencias del Hospital del Mar, y sé de primera mano lo que está pasando, en qué situación nos encontramos actualmente, y sinceramente me siento mucho más protegido allí, en urgencias, pese a estar recibiendo cada día, en primera línea, a muchísimos pacientes con covid, que en bibliotecas. Esto solo puede significar que alguna cosa, por no decir todo, se está haciendo muy mal en las Bibliotecas de Barcelona. Da que pensar, ¿no creen?