Mejor seguir con las restricciones
La OMS ha recomendado a España que no relaje aún las restricciones sanitarias. Sin embargo, diversas comunidades autónomas se aprestan a rebajar las medidas adoptadas hace apenas unas semanas. La razón principal sin duda es de orden económico, tal como sucedió ya en verano y en Navidades. Ciertamente hay sectores excesivamente perjudicados por la crisis, en particular la hostelería y el turismo, a los que no se puede dejar abandonados. Pero la solución no debería consistir en alternar aperturas y cierres en ciclos recurrentes, sino en ayudas directas suficientes para permitir su supervivencia y evitar por todos los medios los sucesivos rebrotes.
Nuestro país, como otros, registra un continuo vaivén de confinamientos y desescaladas que parece no tener fin. Todos confiamos en que las ansiadas vacunas pongan término a esta inestabilidad, pero esto no va a suceder hasta por lo menos el verano próximo, cuando un 70% de la población haya sido inmunizada. ¿Tendremos que seguir mientras con este régimen de idas y venidas?
Personalmente creo que este intento de resolver el dilema entre economía y salud contribuye a prolongar el problema. Mejor hubiera sido mantener restricciones cuando fue posible, tanto en verano como en Navidades, y sería preferible continuar ahora con ellas; desde luego, subvencionando entre tanto a los negocios afectados. De lo contrario, podemos encontrarnos tras Semana Santa, o incluso antes, con una cuarta ola que tire por tierra lo logrado y nos obligue a empezar otra vez.
nhasta su negativa a personarse en una sórdida tienda de electrodomésticos del Raval en la que el dispositivo de búsqueda localizó el móvil robado. Como la Policía no hizo su trabajo y yo disto mucho de ser un justiciero exagente de la CIA como el que encarna Liam Neeson en Venganza, el teléfono fue ubicado días más tarde en Los Angeles, California. Estoy harto. Harto de vivir en esta ciudad insegura en la que la única duda que tengo no es si volverán a atracarnos, sino dónde y cuándo diablos volverán a hacerlo.
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