Calviño insta a las autonomías a dar ayuda a las pymes
La vicepresidenta dice que cuentan con 2.000 millones para ese fin En Catalunya son 342
La vicepresidenta económica, Nadia Calviño, instó ayer a las comunidades a aplicar 2.000 millones para hacer llegar ayudas directas a las empresas. Durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados, recordó que las autonomías accederán este año a 8.000 millones de euros del fondo europeo React-EU (10.000 millones hasta 2022). Con esta cantidad, dijo, las autonomías cuentan con la «financiación suficiente» para hacer frente a sus necesidades sanitarias y sociales, «pero también para dar ayudas directas la a las empresas en sus territorios».
Según añadió, los gobiernos autonómicos «ya han comunicado al Ministerio de Hacienda que destinarán aproximadamente un 25% de esta cifra, de estos fondos precisamente a pymes, autónomos, emprendedores y a la creación y mantenimiento de puestos de trabajo». Y son esos 2.000 millones autonómicos los que Calviño instó a ser aplicados en ayuda de las pymes. En Catalunya, la cifra es de unos 342 millones.
Nuevo plan de 11.000 millones
La vicepresidenta también se refirió al nuevo plan de 11.000 millones de euros anunciado el miércoles por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para hacer llegar ayudas a empresas, pymes y autónomos de los sectores y territorios más afectados por la crisis, en particular, el turismo y la hostelería.
Calviño confía en que las nuevas medidas puedan estar aprobadas en marzo y dijo que tendrán como objetivo principal «reforzar la solvencia de los balances de las empresas», para «darles un mayor músculo para que puedan retomar su actividad, hacer las inversiones necesarias y contratar a los trabajadores» cuando se inicie la recuperación económica.
Las medidas, según explicó, irán destinadas a aliviar la carga financiera de «empresas viables que se ven temporalmente afectadas por la caída de la actividad y que pueden estar en una situación de sobreendeudamiento» por la crisis sanitaria.
Según Calviño, el Gobierno trabaja con el Banco de España y las entidades financieras para un análisis preciso sobre la solvencia empresarial que permita «el mejor uso de los recursos públicos para reforzar empresas viables».
En este sentido dijo entender «muy bien» que las empresas pidan más ayudas y que las entidades financieras –que se resisten a aceptar quitas de deudas– «defiendan sus intereses individuales». Pero «el Gobierno y el Congreso están para defender los intereses generales» y eso pasa por una gestión eficiente de las ayudas que presten a las empresas tanto el Estado como las comunidades autónomas, añadió la vicepresidenta.