Sants aspira a ganar puntualidad con el nuevo reparto de vías
Gracias a la reforma del esquema de plataforma de la estación, los trenes del túnel de Catalunya y de paseo de Gràcia disponen ahora de cuatro apeaderos cada uno.
El abigarrado sistema ferroviario de Barcelona está de enhorabuena con la finalización de la reforma del esquema de la estación de Sants, que ahora dispone de cuatro vías de estacionamiento para cada uno de los dos túneles que llegan a la terminal. De esta manera, y de una vez por todas, se agiliza la subida y bajada de pasajeros y se reduce el impacto en caso de incidencia en algún convoy. Esta actuación, conocida como 4+4, ya es una realidad al 100% desde ayer gracias a una inversión cercana a los nueve millones de euros. De rebote, se espera que Rodalies sea ahora más puntual y eficiente que antes de la transformación.
Hasta ahora, de las ocho vías destinadas a servicios de ancho convencional (Rodalies, regionales y larga distancia), dos de ellas cubrían las 618 circulaciones que usan a diario el túnel de plaza de Catalunya mientras que las otras seis se encargaban de despachar lo que llegara o fuera camino de la galería de paseo de Gràcia, 396 circulaciones cada día. La nueva configuración equilibra la funcionalidad de la terminal, de manera que cada túnel tiene cuatro vías de estacionamiento.
Nuevo reparto
Así las cosas, los trenes que transcurren a través de Catalunya en sentido L’Hospitalet de Llobregat quedan estacionados en las vías 7 y 8, mientras que los que usan el mismo tubo en dirección norte paran en los andenes 9 y 10. Los del paseo de Gràcia hacia el sur se quedan con las plataformas 11 y 12, y los que suben hacia arriba se detienen en la 13 y la 14.
Adif confía que con la nueva configuración se reducirán los tiempos de paso de los trenes que circulan por la estación, ya que estas operaciones de subida y bajada de viajeros de los convoyes del túnel de Catalunya pasan a realizarse en dos vías con andén común, en vez de una vía como ocurría anteriormente. La configuración anterior, en muchas ocasiones, obligaba a un tren a detenerse en el túnel a la espera de que el raíl quedara libre para poder acercarse y desencochar pasajeros.
Gestión automatizada
Con el nuevo esquema de vías, según reza el comunicado de Adif, la estación de Sants es la primera gran terminal de viajeros de la red que se gestiona íntegramente con un sistema automático de enrutamiento, que «maneja los desvíos y señales sin requerir la intervención constante del personal de circulación». Los empleados se limitan a supervisar el buen funcionamiento de todos los sistemas e intervienen solo en caso de incidencia. Esta planificación «redunda en una mayor agilidad en la gestión del tráfico, acortando los tiempos de realización de las tareas sistemáticas de control de tráfico y contribuyendo a una mayor ergonomía de los puestos de circulación». Si se traduce en más puntualidad, ya se verá.