Endesa reduce un 41% su beneficio pero mantiene sus previsiones
Endesa registró un beneficio neto de 491 millones de euros en el primer trimestre de 2021, un 41% menos que en el mismo periodo del año anterior, cuando disparó sus resultados hasta los 831 millones. La compañía justifica esta caída por el impacto del covid y por la volatilidad de los precios en el mercado mayorista de la electricidad (denominado pool) por el impacto de la tormenta Filomena y la subida del precio de los derechos de emisión de CO2 y las materias primas, así como «las condiciones competitivas en comercialización».
«El primer trimestre es excepcional por varios motivos y Endesa considera que el resto de 2021 no será tan extraordinario», según la compañía. En este sentido, y a pesar del mal resultado cosechado, la energética propiedad de la italiana Enel confirma sus objetivos financieros para 2021, anunciados en noviembre pasado, de 4.000 millones de ebitda y 1.700 de beneficio neto.
En cuanto al resultado bruto de explotación (ebitda), Endesa obtiene 1.019 millones lo que supone un descenso del 31%, que se queda en el 9% en términos comparables excluidos extraordinarios registrados en 2020. La empresa logra con esos 1.019 millones mantenerse en línea con los objetivos comunicados previamente al mercado para el conjunto de 2021. Además, la empresa ha reiterado al mercado su compromiso con la senda de descarbonización, logrando elevar al 91% el porcentaje de generación en la España peninsular exenta de emisiones de efecto invernadero. Esto supone superar el 89% fijado para el año 2023 y compara con el 79% del mismo trimestre de 2020. La mayor producción de fuentes renovables, fundamentalmente eólica, explica, según Endesa, la consecución de este hito.
Inmersa en su despliegue renovable, ha elevado su cartera total de proyectos renovables hasta los 44.400 megavatios, desde 41.800 megavatios a cierre de 2020.■