La UE pide a Biden que exporte vacunas antes de pensar en liberar patentes
Los Veintisiete responden a Washington que la suspensión de los derechos de propiedad intelectual «no es una solución mágica» «La urgencia ahora es acelerar la producción», avisa Von der Leyen
La propuesta del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de apoyar la suspensión temporal de las patentes de las vacunas contra el covid-19 recibió ayer un jarro de agua fría de la Unión Europea (UE). Aunque los jefes de Estado y de Gobierno de la UE están dispuestos a discutir todas las iniciativas que hagan posible un aumento de la producción de antídotos consideran que, a corto plazo, la solución pasa por que los países y regiones que producen a gran escala –como Estados Unidos– copien a Europa y exporten vacunas.
«Estamos dispuestos a apoyar todo lo que lleve a un aumento de la producción mundial, pero a corto plazo no es una solución mágica», respondió el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, durante la cumbre de Oporto sobre la iniciativa lanzada en octubre pasado por la India y Sudáfrica, en el marco de la Organización Mundial del Comercio, y que revivió el miércoles cuando el presidente estadounidense anunció públicamente que apoya la idea.
«Es muy importante estar abiertos a esta discusión pero hay que tener en cuenta que es una cuestión a largo plazo. La urgencia ahora es acelerar la producción de vacunas y garantizar que se distribuyen de forma equitativa», insistió la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien volvió a invitar a la Casa Blanca –y a otros países productores– a exportar vacunas.
«La UE es la farmacia del mundo: 400 millones de dosis producidas y el 50%, unos 200 millones, exportadas a 90 países distintos. Así que invitamos a otros a hacer lo mismo, porque es la mejor manera, a corto plazo, de hacer frente a los cuellos de botella y la falta de vacunas a nivel mundial», insistió la alemana. Según las últimas cifras disponibles, hasta el 3 de mayo, la UE había exportado 178 millones de vacunas producidas en el territorio europeo en contraste con la estrategia del America first de Estados Unidos, el grueso de ellas a Japón (72 millones), Reino Unido (18,5 millones), Canadá (18,4), México (9,7 millones) y Arabia Saudí (7,2 millones).
Mensajes de Draghi y Macron
Ni Michel ni Von der Leyen mencionaron explícitamente a Washington o Londres en sus reproches, aunque otros dirigentes europeos no tuvieron tantos miramientos. «Antes de liberar las patentes, hay que quitar el bloqueo a las exportaciones que Estados Unidos y Reino Unido continúan manteniendo», dijo el primer ministro italiano, Mario Draghi. «Emplazo muy claramente a Estados Unidos a poner fin a las prohibiciones a las exportaciones de vacunas y componentes porque impiden la producción [en otras regiones]», urgió el presidente francés, Emmanuel Macron, que explicó que hay laboratorios en Europa, como el alemán Curevac, que dicen tener problemas de producción debido a que los ingredientes necesarios para fabricar los antídotos están bloqueados.
Aunque son muchos los países que se han mostrado dispuestos a discutir la propuesta de Biden, entre ellos España, otros estados miembros como Alemania, sede de la firma BioNTech en cuyas manos está la patente de la vacuna de ARN mensajero Comirnaty, se oponen rotundamente a la suspensión de los derechos de propiedad intelectual de las patentes. «He vuelto a dejar claro que no creo que la liberación de patentes sea la solución para hacer llegar más vacunas a más personas. Creo que necesitamos la creatividad y el poder de innovación de las empresas y eso incluye protección de patentes», opinó Angela Merkel.