‘¡Corten!’, un «‘giallo’ marica»
El director Marc Ferrer regresa a la cita barcelonesa de cine de autor con su nueva película, ‘¡Corten!’, un homenaje al género de terror italiano a través de su particular estilo, con actuaciones estelares y en el que campan a sus anchas el ‘cutrelux’, el petardeo ‘trash’, el poshumor y el espíritu de guerrilla en estado puro.
Las películas hay que hay que hacerlas sea como sea. Así entiende Marc Ferrer el cine, como un acto de resistencia. Por eso sus trabajos se encuentran más allá de toda definición, porque en ellas palpita el trash y la cinefilia, la vanguardia y el petardeo, constituyendo cada una de ellas un auténtico acto de libertad dentro del panorama español.
El D’A Film Festival siempre ha sido su casa. Allí ha estrenado todas sus películas: Nos parecía importante, La maldita primavera, Puta y amada y El corazón rojo. Ahora es el turno de ¡Corten!, definida por su creador como un «giallo marica», o lo que es lo mismo, un insólito homenaje al género cinematográfico italiano de terror en el que encontramos sexo gay, actuaciones de karaoke en clubs nocturnos y las apariciones estelares de La Prohibida, Samantha Hudson y Genís Segarra de Hidrogenesse.
El metacine, recurso narrativo
«Me parecía divertido parodiar estas películas y llevarlas a mi terreno. Tanto el giallo como el slasher se han tachado a menudo de misóginos por la violencia gratuita que se ejerce sobre las mujeres y pensé que podía darle la vuelta desde una perspectiva queer con muchas dosis de homoerotismo», cuenta Ferrer en conversación por Zoom desde las oficinas en Barcelona de Filmin, que ha participado en la producción de ¡Corten! y se encargará de distribuirla.
Tanto en ¡Corten! como en el resto de sus películas, la autoconsciencia es un aspecto fundamental. Quizá por ello, a Ferrer le gusta utilizar el metacine como mecanismo narrativo. Él mismo interpreta a un director de cine low cost que está rodando una película de terror a la vez que se producen unos extraños crímenes que parecen vincularlo a él como asesino. Aunque en realidad, el argumento es lo de menos. ¡Corten! se disfruta por su capacidad de sorpresa constante, por sus personajes fuera de lo normativo, sus toques de comedia absurda, su desparpajo y sus canciones glam. Toda la banda sonora, incluidas las piezas que interpretan La Prohibida y Samantha Hudson, son obra de Adrià Arbona de Papá Topo, y son un auténtico caramelo pop.
No es la primera vez que La Prohibida trabaja con Ferrer, él es el director de algunos de sus videoclips. En este caso, ella siempre había soñado con ser una actriz de terror italiana, así que el crush entre ambos fue inmediato a la hora de abordar el proyecto. «El terror ahora tiende al realismo crudo, pero a mí me gustan estas películas que te sumergen en un universo completamente artificial y sofisticado. Ahora se miran con cierta ironía, pero a mí me encanta jugar con estos estereotipos de mujeres perfectamente maquilladas y peinadas perseguidas por un psicópata», continúa la célebre diva drag queen, que interpreta a Amapola, en ese juego de espejos y alter egos que tanto le gusta practicar al cineasta barcelonés.
Vivir en el ‘underground’
Ambos se encuentran cómodos como outsiders. «El underground es la alcantarilla en la que vivo cómoda y feliz. Tiene sus beneficios, como la libertad absoluta y no formar parte de un engranaje. Yo creo que no encajo en otro planeta, solo en el mío», afirma La Prohibida. «A ti te pasa lo mismo, ¿no Marc?», interpela al director. «En mi caso es una cuestión de ritmo. Yo pienso en una película y tengo que hacerla, no puedo pasar más de cuatro años esperando la financiación. Mi espíritu es incompatible con la producción convencional».
«El terror tiende al realismo crudo, pero prefiero los universos artificiales y sofisticados», afirma el director