«ERC debería levantar el ‘cordón sanitario’ al PSC, y el PSC debe salir del rincón»
«El PSC tendría que tomar nota de lo que pasó en Madrid con el inmovilismo de Gabilondo»
Líder de En Comú Podem en el Parlament. Los ocho diputados de su grupo han cobrado esta semana un protagonismo inusitado tras la renuncia de ERC a formar Govern con Junts. Insta a republicanos y socialistas a «salir de su zona de confort» y a acordar un Ejecutivo progresista que evite las elecciones. Jéssica Albiach (València, 1979) dirige a los ocho diputados de En Comú Podem en el Parlament, que esta semana han cobrado un protagonismo inusitado tras la renuncia de Pere Aragonès a formar un Govern con JxCat. La líder de los ‘comuns’ insta a ERC y PSC a «salir de su zona de confort» y acordar un Ejecutivo progresista que evite las elecciones.
— ¿Los ‘comuns’ ya se preparan para las elecciones?
— Nos estamos preparando precisamente para que no haya elecciones. Creemos que serían un insulto a la ciudadanía. Llevamos ocho meses con un Govern en funciones, dividido, que no está dando respuestas. Los esfuerzos deberían estar puestos en el proceso de vacunación, en reabrir los CAP cerrados, en ver cómo planificamos el curso escolar, en trabajar en la cogobernanza de los fondos europeos... Y nos encontramos con que por el inmovilismo del PSC, que debería dejar porque nos llevará al desastre, y por el cordón sanitario que ha puesto ERC al PSC y que se debería levantar, se acercan las elecciones. Por nosotros no quedará. Una repetición de la fórmula entre ERC y JxCat sería abocar a Catalunya a la resignación.
— Entre el inmovilismo y el cordón sanitario, ¿quién tiene la principal parte de culpa?
— No me pondré a repartir carnés de culpa, pero es compartida. El PSC debe salir del rincón. Yo le reconozco a Illa que ha ganado las elecciones, pero al final los votos no son para poner en una vitrina, se deben poner al servicio del país y la gente. Y ERC debe entender que tiene que tejer otras alianzas, y que la aritmética es tozuda y los números deben dar.
— ¿Cuál es su objetivo en las negociaciones con ERC?
— Hay diferencias importantes con las negociaciones entre ERC y JxCat. Ellos empezaron a hablar del Consell per la República, que no deja de ser una institución que quiere tutelar a la Generalitat. Y nosotros hemos empezado a trabajar el programa en torno a cinco ejes.
— ¿Se puede cerrar esta semana?
— No quiero poner fechas. Pero hay buena predisposición por las dos partes, y empezamos a ver coincidencias programáticas. Para nosotros es muy importante que ERC de una vez por todas entienda que JxCat no puede formar parte del Govern y que no puede condicionar al próximo Govern.
— ERC y la CUP tienen un pacto firmado para la investidura. ¿Ustedes lo comparten al 100%?
— Soy una persona de palabra, y quiero pensar que las personas con las que me siento a negociar también. Respeto los pactos previos que había entre ERC y la CUP.
— ¿También al respecto de que si no funciona la mesa de diálogo se plantearía un referéndum?
—Es que no contemplo que no funcione la mesa de diálogo. Todos los conflictos nacionales en el mundo siempre se han desencallado a través de una mesa de diálogo, de negociación.
— Ayer hubo una reunión entre ERC, JxCat y la CUP. ¿Es posible que esto acabe con un pacto in extremis entre independentistas?
— Estamos viendo cómo los viejos bloques se están deshaciendo. Ahora quedan los intentos por parte de los partidos que se resisten a esta caída de los bloques. Lo que está claro es que, si eso prosperase, solo serviría para llevar a Catalunya a otra legislatura fallida. Nada ha cambiado. Al contrario: solo ha empeorado desde que hace un año y medio el ‘president’ Torra dijo que no había confianza ni lealtad entre los socios. La relación entre JxCat y ERC no funciona, está rota.
— Ustedes prefieren entrar en el Govern que apoyar un Ejecutivo de ERC en minoría, pero ¿cierran la puerta a esa posibilidad?
— No negociaremos a través de los medios. Sí puedo decir que nosotros seríamos garantía de que el Govern apuesta por el diálogo como solución. Y también de que se cumplen los compromisos.
— ¿Cuándo fue la última vez que habló con Salvador Illa?
— Diría que a finales de la semana pasada.
— ¿Y hablaron del asunto?
— Vamos hablando a menudo. Hemos tenido un canal de comunicación abierto desde el 14 de febrero. Considero que debemos hablar con todas las fuerzas, sobre todo con las progresistas.
— ¿El PSOE y la Moncloa se deberían implicar en la negociación si no quieren elecciones? ¿Tendrían que hablar con Illa para que facilitara la investidura de Aragonès?
— Hasta ahora el Gobierno ha estado centrado en la lucha contra el virus. Ahora tenemos que avanzar para sacar adelante el programa de coalición progresista que tenemos. Y aquí Catalunya y la mesa de diálogo deben ser protagonistas en la nueva etapa que se abre para el Gobierno central. Por tanto, el PSOE no se puede inhibir de la gobernabilidad de Catalunya, y debe trabajar en las soluciones para que funcione. No solo debe trabajar desde la mesa de diálogo, sino que los indultos deben ser también una herramienta que ayude a avanzar. Será difícil que la mesa de diálogo avance mientras no se solucione este tema.
— ¿El PSC debería tomar nota del mal resultado de Ángel Gabilondo en Madrid, en caso de que sus encuestas aconsejen una repetición electoral?
— No podemos contemplar una posible repetición electoral en función de lo que nos dicen las encuestas. La gente ya votó. Y obviamente el PSC debe tomar nota de lo que pasó en Madrid, de cómo el inmovilismo de Gabilondo lo llevó a esos resultados. Además, existe el peligro de que crezcan tanto la abstención como la extrema derecha.
—Si Illa consiguiera que Laura Borràs convocara un pleno de investidura para investirlo a él, ¿qué votarían los ‘comuns’?
— Es que nosotros no queremos una investidura fake, ni por parte del PSC ni por parte de ERC.